A partir de los reclamos que se han multiplicado a raíz del bajo caudal de los arroyos de la ciudad, los alambres en algunos cursos de agua y la contaminación, entre otros asuntos. Conformaron comisiones de trabajo.
Un grupo de organizaciones sociales apartidarias, y vecinas y vecinos en general, conformaron la Mesa por el Agua y el Ambiente de Alta Gracia, un espacio social que pretende abordar la problemática de los arroyos y sus cuencas en la zona.
Con el objetivo de propiciar la recuperación y mantenimiento del caudal natural de los cursos de agua, de promover el acceso irrestricto a los arroyos, y de trabajar en propuestas frente a la provisión de agua potable, la Mesa funcionará con comisiones para proponer acciones concretas.
«Esta Organización asume la responsabilidad que le compete con amplitud, con decisión, con sentido resolutivo, y con amor por la Ciudad«, plantearon desde la Mesa en su documento fundacional.
Por otra parte, informaron que el lunes 23 de enero realizarán una jornada informativa abierta en Plaza Solares a las 19 horas. El objetivo es dialogar con la ciudadanía, y dar a conocer los diferentes problemas que hay en todos los cursos de agua.
Finalmente, invitaron a todas las vecinas y vecinos a participar de la Mesa y de sus comisiones a través de los siguientes canales:
-Correo Electrónico: aguayambiente.ag@gmail.com.
-Facebook: Mesa por el Agua y el Ambiente de Alta Gracia
-Instagram: aguayambiente.ag
El documento de la Mesa
Las ciudades se destacan, entre otras características, por sus recursos naturales, y revelan su desarrollo y salud social por el cuidado que hacen de los mismos.
En nuestra ciudad, en nuestra querida Alta Gracia, asistimos con estupor a un proceso de degradación del arroyo Chicamtoltina que está virtualmente seco. Su caudal ha desaparecido. Hoy, por caso, el Primer Paredón, otrora cuasi balneario, no es más que un charco de agua estancada, evaporándose. No corre agua. El cauce casi seco es una cicatriz en la Ciudad que nos interpela.
Hace más de diez años, un grupo de vecinos organizados alertó a la comunidad toda, sobre las anomalías que impactaban en la salud del curso de agua, que lo diezmaban, y que auguraban un futuro sombrío. Nada fue una exageración. El caudal se reducía, un alambrado ilegítimo impedía recorrer el arroyo, y un proceso judicial eterno y amañando terminó por cimentar el resultado que hoy sufrimos.
Pero no fue lo único que aconteció en estos años. Se multiplicaron las demandas de agua potable en distintos barrios de la Ciudad, y las inversiones no fueron suficientes ni adecuadas, atento al incremento notorio de la población y al cambio climático que deriva en un incremento en el consumo de agua. Los sectores periféricos deben ser asistidos con camiones cisterna, y muchos otros carecen de agua con regularidad.
En este escenario, recientemente la opinión pública logró conocer sobre el desarrollo de una obra de infraestructura privada que tomará agua cruda (sin potabilizar) desde el caño maestro que une al río Anisacate con la planta potabilizadora local, hacia un establecimiento privado, justamente el mismo que mantiene alambrado al arroyo Chicamtoltina. Al conocerse la noticia, se produjo un hecho curioso: el expediente oficial del acueducto no aparecía, y de la obra se sabía o decía poco. En este momento la misma está suspendida.
Es insoslayable considerar además el efecto que produce la extensa sequía que afecta a gran parte del país y que sugiere un ámbito de análisis más amplio: porqué las políticas públicas mantienen un régimen de desarrollo que implica la eliminación del bosque nativo.
Hoy la problemática no es sólo relativa al caudal del arroyo Chicamtoltina y sus afluentes (y otros cursos de agua de la zona), y al libre tránsito en la ribera de estos, sino que se ha extendido a la del acceso al agua potable.
Por todo esto, y ante la ausencia durante años de repuestas adecuadas y eficaces de parte de quienes deben darlas, un grupo de organizaciones y vecinos nos hemos convocado para afrontar coordinadamente este problema, con la plena convicción de que individualmente o aislados no accederemos a las soluciones que necesitamos.
Así, hemos decidido la conformación de un instrumento capaz de reunirnos, organizarnos, potenciarnos e incluirnos, con fines específicos y comunitarios. Este instrumento es la Mesa por al Agua y el Ambiente de la Ciudad de Alta Gracia (MAyA).
Desde esta Organización, las tareas serán regidas por tres objetivos generales:
- Propiciar la recuperación y mantenimiento del caudal natural del arroyo Chicamtoltina, de sus afluentes y otros cursos de agua de la zona, hoy severamente reducidos.
- Promover el acceso irrestricto a todas las zonas de arroyos y otros cursos de agua a las cuales la Constitución Nacional y normas derivadas permiten, referido al camino de sirga.
- Observar la problemática de la provisión de agua potable para todos los ciudadanos, la situación del tratamiento de aguas servidas y procesos afines.
Para la consecución de estos objetivos, esta Organización se estructura inicialmente en tres comisiones de trabajo:
- Comisión de Prensa y Comunicación
- Comisión de Expresión Artística y Acción Pública
- Comisión de Ambiente y Formación
El devenir de las tareas a afrontar, y las circunstancias que se prevén cambiantes, podrán ser motivos para la adaptación de este esquema de comisiones, y otros aspectos estructurales.
De manera progresiva se avanzará con la definición de objetivos específicos.
El modo de gestión interna será del tipo asambleario, con la coordinación general mediante un Comité Central.
Serán sus principios irrenunciables:
- La apertura a toda persona u organización interesada en participar, favoreciendo la ampliación permanente y el fortalecimiento de la convocatoria.
- La disposición para la articulación con otras organizaciones, entes públicos y privados, entidades profesionales, educativas y de la comunidad en general, siempre que esa vinculación colabore con los objetivos previstos.
- La investigación sobre los asuntos razonablemente relacionados a los objetivos y la difusión a la opinión pública.
- La base para la toma de decisiones que impliquen el compromiso de la Organización será a partir de una modalidad asamblearia.
- No será un órgano partidario, ni participará de propuestas electorales.
- Sostendrá un criterio propositivo en sus acciones, y nunca persecutorio, denostativo o intransigente. El diálogo amplio será su permanente modo de respuesta.
Esta Organización recoge años de acciones, luchas, aprendizajes y esperanzas de muchos conciudadanos que decididamente actuaron frente a la problemática, y hace un aprovechamiento de todo el caudal informativo que se obtuvo de esa gestión.
Esta Organización asume la responsabilidad que le compete con amplitud, con decisión, con sentido resolutivo, y con amor por la Ciudad.
ALTA GRACIA. Enero de 2023.
