Entrevistada en “Que No Se Te Escape”, Lorena Salrach, abogada y vecina de barrio La Perla contó en primera persona la problemática de la falta de agua y brindó detalles sobre un amparo colectivo que promovió para demandar la inmediata normalización del servicio.
“Vivo en la parte más alta del barrio, colindante con la Reserva El Amanecer. El barrio hace muchos años sufre esto. Yo vivo hace seis y todos los veranos no tenemos servicio diurno de agua”. De esta manera introdujo la charla Lorena Salrach, refiriéndose a una problemática crónica que en los últimos meses se profundizó.
“Este año, a partir de la obra de la planta potabilizadora, el servicio se empezó a cortar antes del verano. En septiembre ya teníamos problemas de cortes diurnos. No obstante nos la bancamos porque a la noche se cargaban los tanques, pero a las seis de la mañana ya no teníamos agua. El 23 de diciembre se cortó el servicio por completo, ni de día ni de noche. Empezamos a hablar con la gente del centro vecinal, que hizo de nexo con la Municipalidad para que proveyeran con camiones cisterna. Se armaba una lista en el barrio por whatsapp, se le pasaba al camión y distribuía. Pero las personas que nos levantábamos a las seis de la mañana y volvíamos de trabajar a las diez de la noche, si en la casa no había nadie, no te cargaban. Si no tenías alguien que subiera al tanque, no te cargaban”.

Una semana después, al borde del inicio de la feria judicial, Salrach preparó una acción de amparo colectivo con el apoyo de algunas vecinas y vecinos con titularidad del servicio. En ella, se incorporó una medida cautelar. “Hay alguna jurisprudencia a nivel nacional con resultados favorables”, apuntó respecto del amparo colectivo. “Pero necesitábamos también una respuesta rápida de la Justicia, por lo que metí en la misma acción, una medida cautelar para que se brindara de manera urgente e inmediata el servicio de agua potable”, completó.
Relató Salrach que la acción de amparo ingresó el primer día inhábil judicial por la feria, por lo que recayó en el Juzgado de Alta Gracia. Al estar demandada la COSAG, la Municipalidad y el Ente Regulador de Servicios Públicos (ERSEP) por la falta de control, indicó la vecina y abogada que “el juez de feria local se declaró incompetente, desdobló la presentación y tomó la medida cautelar e intervino”. La cuestión de fondo quedó pendiente para cuando vuelva a su actividad normal el Poder Judicial y el amparo quede en manos de la Cámara Contencioso Administrativa de la ciudad de Córdoba.
Entiende Salrach que tanto la Cosag como la Municipalidad son “solidariamente responsables”, ya que a uno le corresponde el mantenimiento de la infraestructura y al otro la provisión del servicio.

Asimismo, advirtió que si bien todo interés y compromiso ayuda, venga del partido que sea, “hay cuestiones que no tenemos que permitir como vecinos”. Y se explayó: “No tenemos que permitir que esta cuestión juegue en la cancha del partidismo, porque a algunos les conviene y a otros no. Llevarlo a la cancha de los partidos políticos, lo único que va a hacer es que el vecino sea usado”.
Y respecto de la problemática del agua de manera estructural, esgrimió: “Falta voluntad, que las obras se hagan y que se haga una planificación seria y a conciencia sobre el crecimiento demográfico exponencial que está teniendo Alta Gracia y que va a seguir teniendo. Los barrios crecen y crecen y nos encontramos con que nos falta el agua”.
Finalmente, sobre la experiencia diaria y cotidiana de vivir sin agua, sentenció: “Es inhumano”. Y detalló: “El agua para consumir la compramos. El camión cisterna nos carga el tanque cada tres días. Hay casas en las que tenés dos familias dependiendo de un mismo tanque, con 40 grados de calor”.