Por Valentina Garbarino. Luego de la anulación en el año 2003 de las leyes de obediencia debida y punto final, se dió inicio al primer juicio de Lesa Humanidad en Córdoba. La causa denominada Brandalisis sentó en tribunales federales a 8 genocidas, entre ellos a uno de los mayores responsables del terrorismo de estado en Córdoba: Luciano Benjamín Menéndez.
El 27 de mayo de 2008 se daba inicio al primer Juicio de Lesa Humanidad de nuestra Provincia. La causa denominada Brandalisis juzgaba a los represores Luciano Benjamín Menéndez, Hermes Oscar Rodríguez, Jorge Ezequiel Acosta, Luis Alberto Manzanelli, Carlos Alberto Vega, Carlos Alberto Díaz, Oreste Valentín Padován y Ricardo Lardone. Todos acusados por los delitos de privación ilegítima de la libertad, tormentos agravados y homicidio agravado hacía cuatro militantes del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT): Hilda Flora Palacios, Humberto Horacio Brandalisis, Carlos Enrique Lajas y Raúl Oscar Cardozo, victimas del «Circuito del terror», detenidos y desaparecidos en el Centro Clandestino de Detención y Exterminio La Perla entre noviembre y diciembre de 1977.
La metodología utilizada por los represores quedó descubierta después de la investigación realizada por la Fiscalía. Consistía en secuestrar, mantener en cautiverio, torturar para obtener información, fusilar y denunciar los hechos ante la prensa como supuestos «enfrentamientos». Esto les permitía sostener ante la sociedad la idea de que existía una «guerra». Todo esto fue relatado por un grupo de sobrevivientes que testificaron en el juicio.
El Tribunal Oral Federal Nº 2 de la Ciudad de Córdoba, conformado por Jaime Díaz Gavier, José Vicente Muscará y Carlos Otero Álvarez, daba comienzo al juicio que sentó un gran precedente en la historia de los Derechos Humanos de nuestro país. Martín Fresneda y Claudio Orosz, los abogados de las organizaciones H.I.J.OS y Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas, fueron quienes representaron a las hijas de Hilda Flora Palacios, y Mauro Ompré representó a la familia de Carlos Enrique Lajas.
El Fiscal de este tribunal fue el Dr. Maximiliano Hairabedian, acompañado por Graciela López de Filoñuk, Fiscal del Juzgado Federal Nº3 quien llevó adelante la instrucción de la causa, y Jorge Fabián Asís, fiscal del Tribunal Oral Federal Nº2. Marcelo Arrieta representó a las figuras de los «ausentes» Brandalisis y Cardozo. Los imputados fueron defendidos por los Defensores Oficiales María Mercedes Crespi y Adriano Liva. El imputado Jorge Acosta fue representado particularmente por los abogados Alejandro Cuesta Garzón y Jorge Alberto Agüero.
Durante todas las audiencias las salas de Tribunales se llenaron de pañuelos blancos, pancartas y gritos de nunca más. A las afueras multitudes cantaban y pedían a gritos justicia. Se sabía que algo fuerte estaba pasando: Se gestaba algo que quedaria guardado para siempre en la memoria de los cordobeses.
La declaración de Menéndez
Cuando le llegó el turno de declarar a Luciano Benjamín Menéndez, Ex Comandante en Jefe del Tercer Cuerpo de Ejército dijo: “Me niego a declarar porque estos juicios son inconstitucionales. La Constitución Nacional dice que ningún habitante puede ser penado sin juicio previo fundado en ley anterior al hecho del proceso, ni sacado de los jueces que designaba la ley antes de los hechos. La ley vigente cuando la subversión marxista inició el asalto armado a nuestra patria era la ley 14.029, el Código de Justicia Militar. Ella designaba como mi juez natural al consejo supremo de las Fuerzas Armadas» y cerró diciendo “No declaro pues, como no lo he hecho ante nadie que no fuera mi juez natural, a fin de ceñirse al cumplimiento de la Constitución Nacional, hoy permanentemente violada, y para no ser cómplice y facilitar a los marxistas el uso de los medios legales de la democracia, para que nos lleven al abismo de la ilegalidad y la tiranía. El nuestro es el primer país en el mundo en que los compatriotas juzgan a sus soldados victoriosos que lucharon y vencieron por y para ellos. Es incomprensible que las instituciones de la república, para las cuales luchamos, y persisten porque triunfamos nosotros, nos juzguen hoy, para regocijo, y peor, para facilitar el éxito de quienes quisieron y quieren destruirlas y quieren reemplazarlas por su burdo remedo comunista”.
Supo hasta sus últimos días donde estaban los cuerpos de los compañerxs asesinadxs, que había pasado con ellxs, y no dijo nada. Se mantuvo en silencio. Murió callado.
«Este juicio ha terminado»
Tras veinte jornadas de audiencia, el 24 de julio se condenó a los genocidas acusados en la Causa Brandalisis. Manzanelli, Díaz, Padovan y Lardone recibieron perpetua . Al igual que Menéndez, que se encontró detenido en el penal de Bouwer hasta que falleció en el año 2018. Hermes Rodríguez y Acosta recibieron una pena de 22 años por no comprobarse su participación en el asesinato de las víctimas. Al igual que Vega, que por su menor jerarquía fue condenado a 18 años de prisión. En todos los casos se dispuso revocar los beneficios de la prisión domiciliaria a quienes la tuvieran y alojarlos en una cárcel común.
El presidente del Tribunal comenzó a leer la sentencia, y en el noveno inciso se escuchó lo que todxs esperaban: “Declarar a Luciano Benjamín Menéndez, ya filiado, coautor mediato penalmente responsable, de los delitos de privación ilegítima de la libertad calificada por tratarse de un funcionario público, agravada por el uso de violencia, por la duración y por haberse cometido para compeler a la víctima a hacer, no hacer o tolerar algo a lo que no estuviese obligada; imposición de tormentos agravada por la condición de perseguido político de la víctima y homicidio doblemente calificado por alevosía y por el concurso de una pluralidad de partícipes e imponer en tal carácter para su tratamiento penitenciario la pena de Prisión Perpetua e Inhabilitación Absoluta Perpetua, accesorias legales y costas… en consecuencia revocar su prisión domiciliaria y ordenar su inmediata detención y alojamiento en una unidad carcelaria dependiente del Servicio Penitenciario de la Provincia de Córdoba”.
“Feliz por el fallo. Tristeza por las ausencias” fue la frase que marcó a quienes presenciaron aquella sentencia histórica.
La importancia de los Juicios ayer y hoy
Hace 12 años Martín Fresneda, militante de H.I.J.O.S, representaba a la Familia Palacios en el Juicio Brandalisis, tiempo después se convirtió en Secretario de DDHH de la Nación, también fue Legislador por Córdoba y actualmente es Director del Observatorio de DDHH de la Nación.
Le pregunté a Martín cuál cree que fue y es la importancia de los Juicios de Lesa Humanidad, y esto fue lo que nos contó:
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También estuve en contacto con Sol Albareda. Tiene 18 años, es militante y nieta de Ricardo Fermín Albareda, detenido y desaparecido en septiembre de 1979. Sol forma parte de la tercera generación en lucha, generación que es hija de la democracia. Al igual que Martín, nos comentó que implicaron los juicios ayer y hoy:
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Y por último, tenemos la voz de María José Loto, militante de H.I.J.O.S y trabajadora de la fábrica de aviones:
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Para conocer las historias de las victimas ingresa a: http://www.apm.gov.ar/presentes/
Documento leído durante el Juicio Brandalisis: https://www.youtube.com/watch?v=0KMREUFmYBU
Memoria, verdad y justicia. Nunca más.
