Vecinos y vecinas que se acercaron al Concejo Deliberante de Alta Gracia, a proponer la declaración de emergencia ambiental, que permita solucionar definitivamente la contaminación de las lagunas sanitarias, no fueron bien recibidos por los ediles, que derivaron la presentación para una reunión de comisión e incluso el radical Brunengo trató de «vieja chismosa» a uno de los vecinos y lo acusó de buscar «arañar un voto», hecho aplaudido por casi la totalidad de los representantes.
Los vecinos, nucleados en la Mesa Regional por el Arroyo Chicamtoltina, llegaron al recinto legislativo con una nota firmada por vecinos, vecinas y organizaciones sociales de Anisacate y Alta Gracia.
El edil de Unión por Córdoba, Claudio Farías, presidente de la Comisión de Asuntos Ambientales y Salud, hizo mención a que la nota ingresó tarde y que no tuvieron tiempo de verla (pese a que la Municipalidad de Anisacate hizo un pedido similar sobre el tema hace unos meses, pedido cajoneado en esta comisión, precisamente).
La nota pasó a Concejo en Comisión, para que sea tratada el jueves 31 de octubre a las 19.30. Allí estarían presentes los representantes de la Mesa, junto a los nueve concejales de Alta Gracia, al secretario de Obras Públicas Héctor Bupo, el director de Ambiente Diego Ferrari y el presidente de Cooperativa de Obras Sanitarias de Alta Gracia (COSAG), Ennio Mazzini.
BUENAS Y MALAS PALABRAS
Inicialmente, los ediles habían resuelto recibir la misiva sin permitir que los vecinos tomaran la palabra. Ante la requisitoria vecinal y tras un cuarto intermedio, permitieron que sólo una persona se expresara. Fue entonces Elena García quien alertó sobre la gravedad que reviste la contaminación que generan las lagunas sanitarias y fundamentó la propuesta de declarar la emergencia ambiental en la necesidad de conseguir recursos para una obra que definitivamente libere a Alta Gracia y Anisacate de este flagelo.
Posteriormente, mientras los vecinos se retiraban del recinto, y en una injustificada actitud, el concejal radical Roberto Brunengo le señaló al vecino Pablo Catania, que le pregunte a Elena García sobre qué obra hizo el municipio de Anisacate para el tratamiento de líquidos cloacales de sus viviendas. Elena García volvió e interrumpió la sesión y exigió que Brunengo le hiciera la misma pregunta que le hizo a Catania. Por Brunengo, tomó la palabra su compañero de bancada Germán Rodríguez, que trató de poner paños fríos
Sin embargo, después de re-acordar la reunión para el jueves 31, cuando definitivamente se fueron los vecinos, nuevamente Brunengo pidió la palabra, para acusar de partidario el reclamo y cargar personalmente contra Pablo Catania (quien ya no estaba en el recinto), tratándolo de «vieja chismosa» y acusándolo de que busca «arañar un voto», refiriéndose a su militancia política. La insólita actitud de Brunengo fue festejada con aplausos por los ediles oficialistas y el vice intendente, sin recibir reprobación por parte del resto.
RESPUESTA VECINAL
Ante tamaño escándalo, Elena García explicó, en diálogo con Radio Tortuga 102.7, que desde el grupo proponían «una herramienta para gestionar».
Respecto de la agresiva reacción de Brunengo y el aplauso encendido que festejó su actitud, García estimó que «quizás los descolocó el número de personas» que llegaron con el reclamo y la propuesta, y analizó: «No me parece ni siquiera estratégica la reacción».
Por su parte, la Mesa Regional por el Arroyo Chicamtoltina, se reunirá nuevamente en una asamblea abierta, el viernes 25 de octubre a las 18.30 en el salón de la Cooperativa de Luz de Anisacate, para estudiar los fundamentos que acompañen el proyecto a presentar formalmente en el Concejo Deliberante de Alta Gracia el 31 de octubre próximo.