Frente a la decisión de Rodrigo De Loredo, Gabriela Brouwer de Köning, Martín Tetaz y Martín Lousteau, entre otros diputados radicales que armaron el sub bloque «UCR – Evolución» para distanciarse de Mario Negri; el ex presidente del Comité Alta Gracia de la Unión Cívica Radical e histórico dirigente local, Omar Allende, se pronunció críticamente: «Es algo penoso, estoy muy enojado y muy dolido».
En tono personal, Allende manifestó que esta decisión, que generó mucho revuelo en la política nacional y particularmente en las expectativas de Juntos por el Cambio para el futuro próximo, «lastima mi militancia y mi forma de ver lo que es trabajar en la actividad política».
«Tanto Lousteau como De Loredo, y otros amigos más intentan darle una mirada de renovación de cuadros directivos a la Unión Cívica Radical, pero no han tomado las mejores formas y métodos para hacerlo», analizó. «Siempre la renovación va atada a una práctica democrática; no se puede hacer a los empujones ni negando ni desconociendo la trayectoria de hombres y mujeres que han sostenido este radicalismo por años», completó y advirtió que «eso deja un muy mal antecedente».
Empero, expresó que no ha sido exitosa la decisión de este sector radical porque, según Allende, la mayor parte del centenario partido a nivel nacional reconoce que el bloque radical es el que preside Mario Negri: «Más allá de que te guste o no la figura o el estilo de conducción de Mario Negri, es lo que eligieron todos».
En rigor, Rodrigo De Loredo se impuso en la interna radical a Mario Negri en las elecciones Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) de septiembre pasado. «Los amigos de Córdoba se manifiestan a raíz de que Rodrigo De Loredo ganó una elección y se olvidan que Mario Negri está de diputado Nacional porque ganó otra elección. Ése no es un argumento válido. Hay un discurso infantil, con poca sustentación en la forma del sistema democrático», cuestionó Allende.
«Se someten a la votación de un bloque donde entre pares se eligen y luego, como no son favorecidos, se van. Si no respetamos el sistema de mayorías y minorías, estamos condenados a menospreciar y menoscabar el sistema político y democrático, lo que es algo penoso. Estoy muy enojado y dolido con todo esto», concluyó.
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