La orquesta social de La Serranita, «Riooir», participó de «La cultura es la sonrisa», un evento que este sábado 23 de septiembre congregó en Tecnópolis a 2500 niñas, niños y jóvenes de 32 orquestas de todo el país, en una «Gran Orquesta Federal». Mariano Crespo, uno de los profesores que trabaja en La Serranita, compartió la experiencia en los micrófonos de la Radio Tortuga 92.9.
En principio, Crespo explicó que si bien desde mediados de año viene trabajando «Riooir» en La Serranita, el proyecto de orquesta social en Paravachasca arrancó antes de la pandemia en Potrero de Garay.
La participación en la «orquesta federal» que se presentó en Tecnópolis llegó desde el Ministerio de Cultura de la Nación, a través del Programa de Orquestas Infantiles y Juveniles, que inició su labor en 2005 y actualmente nuclea a un centenar de iniciativas, a través de dos líneas: 55 pertenecen al Programa Andrés Chazarreta y 45 al programa Celia Torrá.
Estuvieron como invitados especiales del evento, León Gieco, Nadia Larcher, Nahuel Pennisi, Malena D´Alessio y Rolando Goldman; además de autoridades destacadas de la cultura, como el mismo ministro Tristán Bauer.
Desde principios de año, cuando llegó la mencionada invitación, la orquesta «Riooir» se puso a trabajar en las diez canciones del repertorio arreglado por Gustavo «Popi» Spatocco, quien tuvo a su cargo la dirección de la «Gran Orquesta Federal», que integraron 32 orquestas infantojuveniles de Chaco, La Pampa, Entre Ríos, La Rioja, Córdoba, Santa Cruz, Chubut, Tucumán, Santa Fe, Neuquén, Provincia de Buenos Aires y Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Además, estuvieron presentes la Orquesta de Becarios y Becarias de las Becas Martha Argerich y la Orquesta Sinfónica Juvenil Nacional José de San Martín.
Desde Córdoba, la única representante fue precisamente la de La Serranita.
«Tecnópolis es gigante, así que espacio sobraba. Toda la gente estaba en un predio, divididos por orquestas, y en los momentos descanso se compartían almuerzos, se merendaba. Tuvimos ensayos intensivos. El viernes, tres horas a la mañana, un descanso y otro ensayo de dos horas por la tarde; y el sábado, un ensayo de tres horas a la mañana y el evento a la siesta. Lo lindo es que para esto nos agrupaban por instrumento y no por orquesta. Ahí nos integrábamos todos. Tanto los ensayos como el evento fueron en el microestadio de Tecnópolis. Era una cosa de locos, porque eso fomentaba el intercambio cultural».
Mariano Crespo repasa el evento y desataca que «la organización fue impecable» y que estuvo «muy bien organizado» para contener a un número tan grande de personas y, en particular, a niños, niñas y jóvenes.
De la orquesta de La Serranita fueron 13 niñas, niños y jóvenes, de entre 8 y 14 años, y los cinco profesores: Susana Freisz, profesora de vientos; Aníbal Martinoli, profe de teclados, acordeón, melódica y director; Candelaria, profe de violín; César «Turbo» Mora, percusión; y Mariano Crespo, de guitarra.
«Son muy necesarios estos espacios»
Puntualmente, respecto de la experiencia que se vive en La Serranita con esta orquesta social, destacó Mariano Crespo: «Tenemos un stock de instrumentos para los chicos que van y no tienen instrumentos propios. Los puedan llevarse a la casa, estudiar y tocar. Es absolutamente gratuito. Los chicos van a ensayos generales y a clases personalizadas con los profes. Aprenden a tocar, a leer partitura y viven la experiencia de salir a tocar».
Indicó en este sentido que antes de partir para Tecnópolis, habían estado en las fiestas patronales de La Serranita y en la biblioteca popular La Urdimbre de Villa Los Aromos. Además, adelantó que para fin de año está previsto un concierto en Jesús María, otro en el encuentro folklórico de San Antonio y también un cierre de año en el mismo SUM comunal de La Serranita.
RADIO TORTUGA (RT): ¿Cómo tomaron los chicos esta experiencia?
MARIANO CRESPO (MC): Fuimos trabajando para que se prepararan para un evento grosso. Les decíamos que tenían que ser responsables, estudiar en sus casas, los comprometimos.
RT: ¿Cómo se trabaja pedagógicamente para comprometerles, pero sin meterles una presión que les juegue en contra?
MC: Se dio de manera natural. Era tal el entusiasmo y la ilusión que tenían por viajar que solos se pusieron las pilas. De los 13 pibes que viajaron, dos o tres conocían Buenos Aires. Dimos unas vueltas, conocimos lugares. Y respecto a la actividad musical, no podían parar de tocar. En el colectivo, en el hotel. Estaban muy entusiasmados por sentirse parte de una orquesta gigante.
RT: ¿Qué actividades tienen a futuro?
MC: El 5 de noviembre vamos a tocar a Jesús María. Y para este año nos queda el encuentro folklórico de San Antonio, al que todos los años nos invitan, y estamos pensando una actividad de cierre de año en La Serranita. Y este repertorio que aprendimos para «La cultura es la sonrisa» ya queda. Tenemos un repertorio cargado. El año pasado habíamos arrancado a mitad de año en La Serranita y teníamos cuatro canciones. Ahora tenemos 14. Es bastante lo que tenemos para ofrecer cuando nos invitan.
Finalmente, Mariano Crespo se refirió a las orquestas sociales y su importancia para la comunidad: «Este tipo de proyectos contienen a los chicos, los entusiasma, ven en esto algo esperanzador. Se acercan a una gran familia, que es el de las orquestas. Hay orquestas de barrios que están mejor económicamente y otras de barrios con muchas necesidades. Nosotros trabajamos desde La Serranita y no sabés la falta que hacía un espacio así. Hay un montón de pibes. Son muy necesarios estos espacios».
La orquesta social de La Serranita se reúne los jueves en el SUM de la Comuna, de 18 a 19.30, para el ensayo general. La convocatoria no tiene límite de edad: pueden participar niñas, niños y jóvenes.
Fotos: Orquesta Social de La Serranita y Tecnópolis