Dos hombres fueron condenados a prisión por un hecho de abuso sexual perpetrado en Alta Gracia en junio de 2019 contra una adolescente. La causa había sido instruida por el fiscal Diego Fernández. La Cámara 12ª del Crimen de Córdoba les impuso la pena de ocho años y ocho años y tres meses de prisión respectivamente por abuso sexual con acceso carnal calificado por la participación de dos o más personas, y por amenazas.
Testimonios, informes psicológicos, comunicaciones telefónicas y un relato de la sobreviviente en Cámara Gesell; derivaron en la condena para ambos acusados. Se valoró especialmente que la joven fue llevada engañada hasta el domicilio donde finalmente ocurrió el abuso.
Al momento de la elevación a juicio, por parte del fiscal Diego Fernández, en noviembre de 2020, los entonces imputados «pretendieron desprestigiar a la sobreviviente» informó oportunamente el Ministerio Público Fiscal.
Empero, en ese momento Fernández «valoró que el tipo penal no requiere que la falta de consentimiento se deba probar con signos de violencia física o que la víctima despliegue actos de ‘arrojo’ en resistencia, sino que se debe evaluar todo el contexto». En ese sentido, se acreditó que los condenados, aprovecharon la nocturnidad, supremacía física, superioridad numérica y el aislamiento intra muros, circunstancias que sin duda colocaban a la víctima en una posición desigual, inferior, y por lo tanto de mayor indefensión, lo que permitió consumar el lacerante suceso.
En el texto de la elevación a juicio, se destacó la obligación asumida por el Estado de «proteger al niño contra todas las formas de explotación y abuso sexuales» y la necesidad de visualizar los casos desde una adecuada perspectiva de género.
