En la tarde de este lunes 22 de julio, docentes autoconvocados del Valle de Paravachasca se manifestaron en la intersección de ruta 5 y Malvinas Argentinas, para comunicar a la comunidad que la lucha del sector «no es una interna gremial», sino un «reclamo por salarios dignos y mejores condiciones laborales».
Cabe recordar que a partir de la intervención del Ministerio de Trabajo de la Provincia, a cargo de Omar Sereno, se dispuso la conciliación obligatoria del conflicto entre la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC) y el Gobierno, tras el rechazo gremial de la última oferta salarial.
UEPC tenía previsto un paro de 48 horas para este lunes y martes, que debió quedar suspendido. Este miércoles 24 de julio están convocadas las partes para retomar el diálogo y el Gobierno deberá presentar una oferta superadora.
En la calle
En ese marco, docentes de diversos niveles se convocaron en ruta 5 y Malvinas Argentinas, entre cánticos y carteles pintados a mano, donde dialogaron con automovilistas, que respondieron con bocinazos, para transmitir la acuciante situación que vive el sector.
Paralelamente, se preparó un mate cocido popular al costado de la ruta. «Con sueldos de pobreza, la escuela es imposible», «Para el Gobierno, es un clásico no discutir el básico», «Bocinazo por la educación», «Docente mal pago, esclavo del Estado» y «En Córdoba los docentes somos pobres» fueron algunos de los mensajes que podían leerse en los carteles.
Escalada del conflicto
Cabe recordar que días atrás, el gobernardor Martín Llaryora, preanunciando la conciliación obligatoria, había declarado a El Doce que la oferta presentada por la Provincia, en el marco de la crisis que atraviesa el país, era «la mejor de la Argentina«, y había vinculado el rechazo de UEPC a «un sector político de izquierda que ha tomado parte del gremio«.
Por su parte, Roberto Cristalli, secretario General de la UEPC, entrevistado por La Tiza, aseguró que «la pérdida del poder adquisitivo que hemos tenido entre la inflación y lo que logramos de pauta en la primera etapa, queremos recuperarla con más rapidez desde el mes de junio».
Y también cuestionó como «poco felices y desacertadas» manifestaciones de Llaryora, en las que aludió que la tarea docente demanda cuatro horas. «Los docentes trabajamos mucho más de lo que tenemos que estar en las aulas, está queriendo instalar en la sociedad un argumento para deslegitimar el reclamo docente«, indicó.
Finalmente, adelantó que si la nueva propuesta que el Gobierno pretende presentar este miércoles, no contiene lo que plantea el gremio, «vamos a seguir discutiendo hasta que tengamos lo que nosotros queremos». Remarcó: «Vamos a hacer los esfuerzos que sean necesarios, exigiendo lo que pedimos; acá no estamos renunciando a nada. Si el Gobierno pidió la conciliación, tiene que hacer una propuesta que nos pueda contener a todos nuevamente«.
Reporte y fotos: Quimey Bareiro