Una vecina de Villa El Nylon de la ciudad de Córdoba que dijo por Cadena 3 que Randazzo les prometió relocalizarlos en Alta Gracia activó la alerta del prejuicio. La noticia no está confirmada, pero el vice intendente a cargo del Ejecutivo ya se atajó diciendo que la ciudad no puede recibir gente nueva porque no está en condiciones de brindarles “ni salud, ni seguridad, ni educación, ni fuentes de trabajo”, es decir, ningún derecho. Postura similar a la que sostuvo el ex intendente Mario Bonfigli cuando llegaron los vecinos de barrio 25 de Mayo y que por entonces le costó una imputación por discriminación. “Hice lo que cualquier intendente habría hecho, defender a la ciudad”, dijo ayer Bonfigli en Radio Tortuga. ¿Defendernos de quienes? ¿A quién atacaron los vecinos de 25 de Mayo desde que finalmente se instalaron en Alta Gracia? Por otro lado, florecen en nuestra ciudad emprendimientos inmobiliarios de alta gama cuyos loteos sumados multiplican ampliamente las posibilidades de llegada de nuevos vecinos a los que aparentemente el municipio si está en condiciones de brindar salud, educación, seguridad y fuentes de empleo. ¿Entonces?
Subido a una información que no ha sido confirmada oficialmente y que tal vez sea desestimada, Torres se apresuró a colgar en la ciudad el cartel de “la casa se reserva el derecho de admisión” y repetir un camino que Bonfigli ya transitó. 
