Javier Matías Darroux Mijalchuk, el más reciente nieto recuperado por Abuelas de Plaza de Mayo, fue el encargado de colocar la lamparita 130 en el llamado «patio de las luces» del Archivo Provincial de la Memoria, en la capital cordobesa. Se trata de un ritual que se lleva adelante con cada nueva restitución. En este caso, fue el mismo nieto recuperado, quien está domiciliado en Capilla del Monte, quien protagonizó el emotivo acto.
«En este patio las lamparitas ausentes son los nietos y las nietas que faltan e impulsan a seguir luchando con la firme esperanza de encontrarlos. Cada luz que se enciende nos recuerda la delicada pero potente luz de las luciérnagas que, en su intermitencia, provoca esperanza y nos muestra que la destrucción no es nunca absoluta», explicaba una modesta publicación del Archivo Provincial de la Memoria, invitando a la comunidad a acercarse a compartir este momento trascendental.
Fue en la tarde del martes 6 de agosto cuando Javier Matías, subido a una escalera, colocó esta nueva lamparita, con una emocionada y pequeña sonrisa; observada con atención por un centenar de personas que respondió a la invitación y se dejó conmover por esta nueva batalla ganada a la impunidad, al miedo y al silencio de tantos años de terrorismo de Estado sostenido, que aún mantiene en sombrío secreto la información de dónde están los cuerpos de tantas y tantos desaparecidxs y qué hicieron con tantas y tantos nietxs apropiadxs.
Es hijo de Elena Mijalchuk y Juan Manuel Darroux, ambos desaparecidos en 1977. Su restitución de identidad se hizo pública en junio pasado. “Lo más importante es lo colectivo de la búsqueda por la identidad”, supo decir Javier Matías en una entrevista con Una Radio Muchas Voces de Capilla del Monte, dos meses atrás (leer entrevista en el siguiente link).
En la tarde del martes, la titular de Abuelas de Plaza de Mayo Córdoba, Sonia Torres, tomada de la mano de Javier Matías y dejando ver su contagiosa y esperanzadora sonrisa, habló para los presentes, como lo hizo además la responsable del Archivo Provincial de la Memoria, María Eleonora Cristina. Microrrelatos completaron la jornada.
FOTOS: ARCHIVO PROVINCIAL DE LA MEMORIA CÓRDOBA