La frase de la Pepa Brizuela, cantante de La Barra, sintetizó el alivio con el que el XXXIII Encuentro Anual de Colectividades vivió su última noche. Al ritmo de artistas como Damián Córdoba y el Negro Videla, entre tantos otros, el público dijo presente en el Predio de Colectividades para bailar y disfrutar bajo la luz de la Luna.
El Encuentro Anual de Colectividades logró, tras una jornada de sábado sumamente dificultosa, despedirse con una noche que resultó realmente excepcional en comparación a las anteriores. Con una semana de lluvias permanentes que impactaron negativamente en la asistencia de público al Encuentro, sumado esto a un contexto económico aún complicado para una gran parte de la población, finalmente la noche del domingo logró desenvolverse con normalidad, recordando incluso a otras Colectividades donde, incluso, resultaba un tanto complicado caminar libremente por momentos.
La noche final de la Fiesta se presentó prácticamente sin precipitaciones, con un cielo despejado y permitiendo a la ciudadanía disfrutar de la luna llena al ritmo del más puro cuarteto cordobés de la mano de artistas como Damián Córdoba, La Barra, Vacomoloko, el Negro Videla, entre otros, y con el humor de Camilo y Nardo; en un escenario que nuevamente mostró una participación mayoritaria de varones, dejando nuevamente de lado al cupo femenino que, si bien ya es ley desde fines de 2019, recién fue reglamentado el pasado 7 de febrero.
A diferencia de lo que se venía viendo en las jornadas anteriores, en esta oportunidad se pudieron apreciar las mesas de los patios de comidas con buena cantidad de comensales, con vecinas y vecinos que se permitieron consumir las especialidades de las distintas colectividades y disfrutar de la frescura de la noche.
En este sentido, algunxs representantes de las diversas colectividades participantes mostraron cierto alivio, ante un Encuentro en el cual las ventas no fueron lo esperado, logrando posicionarse mejor aquellos platos más económicos o aptos para compartir. Ni siquiera la posibilidad de almorzar en el predio los días sábado y domingo, sin abonar la entrada al predio, lograron revertir satisfactoriamente esta situación.
Por su parte, el Intendente Marcos Torres se mostró conforme, si bien cauto al momento de arriesgar un breve balance y desafíos para el futuro del Encuentro, aunque sí se arriesgó a expresar su voluntad de que (a contramano de lo que viene sucediendo históricamente) el balance oficial de este Encuentro esté terminado para Marzo.
La nueva disposición del predio y accesibilidad para disfrutar del escenario principal sin tener que pagar obligatoriamente un lugar en la platea, fueron decisiones (en general) bien recibidas por las colectividades que dialogaron con DiarioTortuga.com, si bien reconocen que la menor duración del Encuentro les quita posibilidades de «recuperar» económicamente lo que se pierde en las noches de lluvia.
Ya sobre el final de esta edición de la fiesta más importante de Alta Gracia, quedan cuentas pendientes que deberán ser tenidas en cuenta de cara al futuro: El cupo femenino en el escenario, la manera en que cada año se designa a la Comisión Organizadora, el fortalecimiento del compromiso cultural de distintas colectividades con su oferta al público, el rol que juega la entrada al predio al momento de acercar (o no) al público a la Fiesta, la organización y gestión de la gran feria que funciona en las afueras del predio, son sólo algunos de los puntos que requieren una mirada atenta de parte del Municipio ante una fiesta que, al día de hoy, se encuentra «repensándose» de cara al futuro.
