En las elecciones PASO del domingo 13 de agosto, la alianza Cambiemos logró imponerse en la Provincia con el 44,51 por ciento, alcanzando una inesperada diferencia de 15 puntos sobre Unión por Córdoba. El concejal radical altagraciense Leandro Morer acompaña la tesis de que se nacionalizaron los comicios.
¿Te tomó por sorpresa el resultado?
Sí, totalmente. Si bien desde Córdoba Capital, desde el centro de campaña en manos de Orlando Arduh, nos habían anticipado que había una gran diferencia; al ver cómo se estaba mostrando Unión por Córdoba, principalmente en Alta Gracia, no estábamos tan confiados. Por eso es la sorpresa: yo sabía que se ganaba pero no por tanta diferencia.
Los analistas anticipaban un alto número de indecisos. ¿Por qué te parece que esos votos se volcaron a Cambiemos y mayoritariamente a la lista que encabeza Baldassi?
A nivel provincial, creo que tenemos dos respuestas. Una, es que la campaña estaba nacionalizada: no se votaban ideas ni proyectos, sino en contra de; hubo una falta de federalismo del kirchnerismo y el cordobés no se olvida. Por otra parte, también se votó un no a Unión por Córdoba por la falta de control del narcotráfico, la falta de contención a la industria automotriz. El pueblo cordobés le está pasando factura a Unión por Córdoba, que está desgastada.
¿Qué perspectivas ves en el futuro de Cambiemos y qué expectativas tenés para la Unión Cívica Radical dentro de este armado?
Es cierto que la lista de Baldassi es encabezada por alguien que no es radical, pero de los cinco primeros, que según las PASO van a entrar, tres son radicales. Mirando hacia el futuro, yo estoy convencido de que no hay 2019 sin 2017 y que para octubre hay que seguir trabajando para que esta lista mantenga o supere los números que obtuvo en las PASO y plantar bandera. Acá no ganó el radicalismo ni el PRO, ganó Cambiemos de la mano de Macri. El que gana es el presidente. Pero si nosotros bajamos los brazos y en octubre no mantenemos o no sumamos unos puntos más de diferencia, el 2019 se empieza a alejar. Esta es una gran oportunidad para una oferta política distinta, una forma de hacer campaña distinta.
