El jueves aproximadamente a las 23.30, una llamada telefónica dio aviso de la aparición de Natalia Suárez, la trabajadora sexual que faltaba de su hogar hacía seis días.
La mujer fue hallada en las proximidades de la esquina de Alfonsín y Libertador, y tenía marcas que darían cuenta de haber estado atada y haber sido golpeada y drogada durante su desaparición. Fueron los familiares y no la policía quienes trasladaron a Natalia al Hospital Arturo Illia.
Pasada la medianoche, el Sub Comisario Flores se apersonó en el nosocomio «para informarse de la situación» y prometió novedades para la jornada del viernes. Hasta el momento, no existe ningún detenido.
Resulta sumamente llamativo que la aparición se haya dado minutos después de que la familia de Natalia finalizó la presentación judicial.
