Matías Odiard, secretario de Servicios Públicos y Ambiente de Alta Gracia, se refirió al reclamo de vecinos del barrio 1° de Mayo por la presencia de un basural a cielo abierto en el canal que atraviesa la zona. Según explicó, se trata de un problema histórico que combina dificultades operativas, falta de cooperación vecinal y tensiones entre cooperativas ambientales.
El pasado lunes, vecinas del barrio 1° de Mayo y miembros de la cooperativa de reciclaje CREA participaron de una entrevista en Radio Tortuga 92.9 para exponer la problemática del basural a cielo abierto que afecta a la zona del canal. Las trabajadoras solicitaron formalmente la colocación de más cestos de basura para evitar nuevos acopios, así como una mayor frecuencia del camión recolector que incluya las calles actualmente fuera del recorrido habitual. Desde CREA también plantearon la necesidad de avanzar en un plan de saneamiento integral a mediano y largo plazo.
Ante estos reclamos, el secretario de Servicios Públicos y Ambiente, Matías Odiard, explicó que se trata de un canal que atraviesa el barrio y hacia el cual dan los patios de varias viviendas, lo que facilita que los propios vecinos arrojen allí sus residuos. “Son los mismos vecinos los que tiran la basura al canal, a la vez que se dificulta el ingreso con máquinas”, afirmó. Odiard sostuvo que, desde su asunción hace un año, uno de los primeros sectores donde reforzaron la recolección fue 1° de Mayo. En ese sentido, señaló que el camión recolector pasa “martes y jueves religiosamente” y que sobre calle Zabala Ortiz la frecuencia llega a tres veces por semana.
El funcionario detalló que el municipio ha trabajado junto a la cooperativa ReUSAR en distintas intervenciones, como la limpieza del microbasural detrás del murallón que divide parte del barrio, la colocación de luminarias, mejoras en la plaza y reuniones con los vecinos para acordar acciones conjuntas. Sin embargo, advirtió que la acumulación actual de residuos en el canal es consecuencia de años de descargas continuas y que remover ese volumen implicaría una inversión que supera los 100 millones de pesos, considerando la maquinaria necesaria y el traslado de los residuos al predio de Cormecor.
Frente a este escenario, el municipio inició gestiones ante el Ministerio de Ambiente de la Provincia. “Estuvimos con la gente de ReUSAR en el Ministerio, hablando con el subsecretario de Residuos para solicitar recursos, porque el gasto sería enorme para el municipio. Como Estado tenemos que ser equitativos con todos los barrios”, señaló Odiard. Según adelantó, la Provincia impulsa un plan de saneamiento en distintos puntos del territorio y esperan obtener equipamiento para abordar la situación en 1° de Mayo.
Respecto del reclamo de algunos vecinos que aseguran que el camión no ingresa a todas las calles, el secretario explicó que en el pasado sí existían obstáculos: una de las arterias estaba muy deteriorada y había numerosas conexiones clandestinas que impedían el paso del recolector. Sin embargo, indicó que esos problemas ya fueron corregidos. “Hoy el camión sí pasa, martes y jueves, por la calle intermedia y por la pública; y por la Zabala Ortiz pasa tres veces a la semana. En caso de algún reclamo, lo verificamos con GPS y con los encargados que recorren el sector. Estamos abiertos a revisar cada caso”, afirmó.
En relación con la presencia de la cooperativa CREA en el reclamo, Odiard planteó que algunos vecinos podrían no haber estado al tanto de las intervenciones realizadas en el sector ni haber participado de las reuniones previas entre el municipio y la cooperativa ReUSAR. “Quizás estos vecinos no estuvieron en las reuniones anteriores y se sumaron a CREA sin conocer todo lo que venimos haciendo. Estamos abiertos a colaborar como siempre”, señaló.
Por otro lado, el funcionario se refirió específicamente a las tensiones entre cooperativas y a la posibilidad de que existan otros intereses en disputa. Explicó que ReUSAR viene trabajando junto al municipio y que esto podría haber generado fricciones. “Entiendo que puede haber otros intereses por parte de la cooperativa. He tenido reuniones con la gente de CREA y han venido a exigir cosas de una manera no muy sana, para mí siempre es mejor hablar y no andar con amenazas. Las formas son importantes en la comunicación”, afirmó. Aun así, sostuvo que el municipio está dispuesto a trabajar con cualquier organización que busque mejorar la situación del barrio. “Más allá de esas diferencias, lo importante es el barrio. Si ellos están interesados, vamos a darles una mano”, expresó.








