Ubicada en el sector sur de Alta Gracia, la Reserva El Amanecer colinda con barrio La Perla. Pese a que se trata de un espacio de resguardo ambiental municipal, vecinas y vecinos de la zona advierten que no hay debida cartelería ni personal abocado a su cuidado. Por ello se realizan regularmente actividades comunitarias y de voluntariado para poner en valor la zona. En este marco, el sábado 19 de noviembre, a las 17, se lleva adelante una jornada de limpieza.
Valeria Salgado, vecina de barrio La Perla reconocida por su militancia en pos de la eliminación del basural que durante tres décadas estuvo en este sector de la ciudad y una de las cabezas de «Vecinos por la Reserva El Amanecer», entrevistada en Radio Tortuga 92.9, indicó que este año en particular la organización no pudo mantener el ritmo de actividades que en los anteriores y que, llegando el final del año, observan con preocupación que mucha de la cartelería que han puesto con indicaciones de la flora nativa y la importancia de no arrojar residuos, están destruidos.
«Hay mucha basura y de los carteles que pusimos, sólo queda en pie el grande que indica que el lugar es una reserva«, lamenta. Con esta actividad del sábado 19 de noviembre pretenden realizar una limpieza del ingreso que se encuentra sobre calle Catamarca. «Esperamos que la gente se sume a limpiar y tome conciencia», manifiesta.
Se invita a quienes quieran sumarse, a llevar bolsas y guantes. La hora determinada para la actividad tiene que ver con evitar las altas temperaturas de estos días.
A la deriva
«Tiran de todo: poda, chatarra, basura domiciliaria, animales muertos. NosNos hemos parado a discutir con vecinos que encontramos. A veces se hace la denuncia. Es gente que viene, tira y se va. Se dan situaciones violentas con gente que te dice ‘¿y vos quién sos para decirme que no tire basura acá?'».
La situación que describe Valeria Salgado habla de una falta de conciencia ambiental evidente y también de la ausencia del Estado para intervenir en el debido resguardo del sector, protegido por ordenanza; en tareas de educación ambiental que promuevan un mayor nivel de conciencia y en la aplicación del poder de policía para con quienes impunemente colaboran para convertir este sector nuevamente en un basural.
«Pasan varias cosas feas que se podrían evitar si la reserva tuviera un guardaparque, cartelería; lo que venimos pidiendo hace mucho», indica Salgado en este sentido, subrayando que se trata de una reserva municipal.
En espera
Mencionó la vecina que este año, tras el cambio de autoridades en la Secretaría de Ambiente de la Municipalidad, con el ingreso de Federico Bengolea en reemplazo de Roberto Urreta (quien volvió al Concejo Deliberante), hubo una única reunión con un subalterno, junto a estudiantes para guardaparques que idearon un proyecto sencillo que consistía precisamente en cartelería e intervenciones menores para la reserva. «No era mucho presupuesto», destaca Salgado.
«Tuvimos una reunión, nos dijeron que se iba a hacer; estamos a la espera de eso. Nos reunimos en septiembre, nos dijeron que en octubre se podía concretar y no ha pasado nada. Le contamos a este hombre que hay basura y autos judicializados que están avanzando hacia la zona de remediación, lugar en el que no deberían estar y dijeron que los iban a sacar. Estamos a la espera».
Precisó Salgado que estos estudiantes para guardaparques trabajaron con las y los vecinos que vienen activando voluntariamente la protección del lugar y que también se sumaron a jornadas con escuelas de la ciudad.
Precisamente, acto seguido Salgado contó con alegría lo gratificante que son las visitas que realizan con las escuelas a la Reserva. «Trabajamos con la escuela Irigoyen en pandemia, fue un trabajo lindo. El 25 de noviembre tenemos una jornada con el Instituto Padre Viera, con quienes hicimos una actividad a principios de año».
Pero concluyó Salgado que el problema central tiene que ver con las demarcaciones de la Reserva, con la información clara, con el control y con la educación: «Hay vecinos que tiran basura, por eso estas actividades son también para llamar su atención. Porque la legislación abunda, de hecho la reserva está creada por ordenanza. Pero hay que hacer que la ley se cumpla. El Estado somos todos. Hay un cartel gigante que dice que es una Reserva; hay falta de empatía, conciencia y solidaridad«.