La coordinadora del grupo de Facebook Nosotros Buscando Identidades Biológicas hizo de su historia personal un colectivo que guía a personas que buscan saber quiénes son. Según la Comisión Nacional por el Derecho a la Identidad (CoNaDI) más de 12 mil desconocen su origen.
La historia de Roxana Leiva tuvo un final feliz. Luego de recorrer un sinnúmero de instituciones públicas, charlar con posibles familiares, incluso ir a los cementerios, encontró a su mamá. “Mi historia empezó en 2008 cuando me enteré de que era apropiada por medio de una tía”, relató en diálogo con Radio Tortuga 92.9, y agregó: “Yo no fui adoptada legalmente, son dos cosas distintas y es bueno saber diferenciar eso”.
Según Leiva, su tía sin querer le contó un secreto que ya llevaba años sin revelarse y comenzó una búsqueda que nunca más abandonó. “En mi partida de nacimiento ví que figuraba una señora Lidia A. Hernández, fui al Registro Nacional de las Personas y busqué una partida de nacimiento a su nombre”, señaló en relación a los primeros datos que obtuvo.
“Con esa partida de nacimiento fui al área de Derechos Humanos de la provincia de Córdoba y con ayuda de Cristian Moreschi empecé a buscar a través de la radio a familiares Hernandez Zampa”, contó. “Me contacto con una prima hermana de mi mamá. Me dijo que sabía de mi existencia y de la familia que me tenía. Ella me dijo que creía que mi mamá había muerto en Villa Allende así que fui a buscar sus datos al cementerio pero no la encontré”, agregó.
Finalmente desde el área de Derechos Humanos dieron con la persona que buscaban y Roxana encontró a su mamá. “Después de disfrutarla a mi mama por un año, pensé en que yo estuve muy sola en el camino de la búsqueda y entonces quise buscar la forma de ayudar a esas personas a que le sea un poco más leve el transitar y también crear un espacio de contención”, precisó.
Así comenzó a darle forma a lo que hoy es un grupo de Facebook Nosotros Buscando Identidades Biológicas y que hoy ya cuenta con 6900 personas. “Empecé a contactarme con buscadores y decidimos armar un grupo. En 2014 nos juntamos 30 personas y ahí apareció nuestro ángel, María Gracia Iglesias de la CONADI. Nos ofreció el Archivo de la Memoria para hacer las reuniones y cada vez aparecían más buscadores”, señaló.
En la actualidad, se reúnen en el Paseo de los Artesanos de la ciudad de Córdoba, junto al mural “Mamá buscame” y, a nivel local, buscan el hijo de Monica Ruth, una vecina de la ciudad.
Escuchá la entrevista completa 👇
