FARCO- En Santa Fe la abogada ambientalista Graciela Gómez criticó al gobierno provincial y a los productores agropecuarios por lo que calificó como un “genocidio encubierto” mediante fumigaciones con agrotóxicos.
El tema en Santa Fe volvió al debate público tras la muerte del peón rural Néstor Vargas, luego de manipular agrotóxicos y por la repercusión nacional del caso de una familia de Firmat que perdió un bebé luego de años de sufrir fumigaciones.
En declaraciones a Radio Nativa de Lehman emitidas en Informativo FARCO, Gómez criticó “la connivencia del poder político” y de la justicia de la provincia y en relación al papel de algunos productores expresó que “no se puede fumigar al vecino porque a mi me gusta mi 4 x 4”.
Gómez contó que “el señor (Néstor Vargas) murió por el veneno 2,4 D, no estamos hablando de glifosato sino de 2,4 D que es peor, es más tóxico. En el caso de Firmat tampoco estamos hablando de glifosato, porque en el caso de Firmat están fumigando con dicamba que es clase 2 y está prohibido”.
Con respecto a la desidia estatal en el caso de la muerte de Néstor Vargas en la zona rural de Vera, en el norte santafesino, Gómez dijo “que desde la Corte Suprema de Santa Fe digan que no hay insumos para hacerle una autopsia después de un mes, te da la pauta de la connivencia del poder político del ministerio de Salud”.
La abogada calificó al ministro de Salud Miguel Angel Capiello como “impresentable” y lamentó que haya sido “confirmado para el nuevo gabinete de (el gobernador electo Antonio) Bonfatti”.
Además agregó que “en Firmat donde fue el otro caso emblemático de esta familia que perdió un bebé, que tiene una hija hipoacúsica y que se tuvo que mudar para que la dejen de fumigar y el intendente (Carlos Torres) va a formar parte del gabinete de Bonfatti. Encima los premian a estos sinvergüenzas. A estos delincuentes. Porque el agravante es que son médicos”. Torres será viceministro de Salud provincial, segundo cargo en importancia luego del ministro Capiello.
En relación a la responsabilidad de los productores agropecuarios, la abogada santafesina expresó que “yo no estoy en contra del campo pero esto realmente es un genocidio encubierto. No se puede fumigar al vecino porque a mi me gusta mi 4 x 4”.
Gómez aseguró que para avanzar en una solución “estamos exigiendo una ley a nivel nacional porque la autonomía que ellos dicen que tienen las comunas no sirve, a esta altura no sirve y está probado porque la ley de Santa Fe existe desde hace 16 años y no se respeta. Cada comuna hace lo que se le canta y cada productor manda en el pueblo donde vive, manda más que el intendente y el pueblo tiene que acatar que los mosquitos fumigadores se paseen como automóviles por el pueblo, que se fumigue a 50 metros de las casas, como sucede en Venado Tuerto, lo cual es vergonzoso. Y la justicia tiene una total connivencia con esto porque no hace nada, rechazan los amparos”.
