La Dirección General de Estadísticas y Censos de la Provincia de Córdoba presentó un informe titulado «Brechas de género en los indicadores de bienestar», que analiza diferenciales por sexo, abarcando 25 indicadores construidos a partir de la Encuesta de Bienestar como educación, mercado laboral, ingresos, entre otros. La encuesta refleja condiciones de vida de población urbana, a partir de lo relevado en los cuatro principales aglomerados urbanos: Gran Córdoba, Río Cuarto – Las Higueras, Villa María – Villa Nueva y San Francisco.
Acorde a los debates actuales en torno de la diversidad sexual y de género, desde la Provincia se emite esta aclaración previa: «En concordancia con la mayoría de los operativos estadísticos a nivel mundial, la Encuesta de Bienestar indaga sobre la variable ‘sexo’ desde una perspectiva de declaración jurada y respondiendo a las categorías binarias de mujer/varón. Los análisis de las características o condiciones de vida analizadas con enfoque de género no permiten identificar categorías no binarias ni la interrelación entre el sexo asignado al nacer, la identidad de género y la orientación sexual. En este sentido, la Dirección General de Estadística y Censos a partir de experiencias internacionales, nacionales y provinciales evalúa alternativas de preguntas complementarias que permitan enriquecer a futuro este tipo de análisis. En este marco, el informe utiliza la denominación ‘brecha de género’ para representar el diferencial por sexo».
Condiciones de vida de las mujeres cordobesas
De acuerdo a los resultados recabados en el informe “Brechas de género”, en promedio, los hogares comandados por mujeres (con o sin cónyuge) acusan menores niveles de ingresos, mayor peso del gasto en alquiler (entre los hogares inquilinos) y menor acceso a Internet por banda ancha.
En cuanto a la desigualdad de ingresos, los hogares comandados por mujeres (con o sin cónyuge) dan cuenta de un nivel de ingresos que en promedio es un 17% menor al de los hogares comandados por varones.
Esta desigualdad se observa también en el porcentaje de hogares con ingresos por debajo del 60% de la mediana de ingresos del conjunto de hogares, dando por resultado que los hogares comandados por mujeres presentan un mayor porcentaje de prevalencia de ingresos bajos. Asociativamente se desprende que en el caso de los hogares inquilinos se observa un mayor gasto relativo en alquiler. También que los hogares comandados por mujeres tienen un menor nivel de acceso a Internet de banda ancha.
A nivel de personas, las mujeres dan cuenta de un mayor nivel educativo (tanto a nivel general entre las personas ocupadas), pero de una menor inserción en el mercado laboral. Asimismo, entre las mujeres que trabajan es más frecuente el uso de transporte público y menos habitual que tengan jornadas laborales largas de más de 50 horas a la semana.
Complementariamente, entre las personas ocupadas, según el informe las mujeres dan cuenta de una mayor participación en actividades de voluntariado y finalmente, a nivel de autopercepción, entre las mujeres es menos frecuente percibir su salud cómo “Buena o Muy Buena”. Sin embargo, este conjunto de brechas en detrimento de las mujeres no configura en ellas una menor percepción de satisfacción ante la vida.
En el siguiente link, se puede acceder a los datos estadísticos mencionados: https://datosestadistica.cba.gov.ar/dataset?q=poblaci%C3%B3n
FUENTE: PRENSA.CBA.GOV.AR
