Si bien no está previsto un acto de inauguración oficial, esta semana abrió las puertas el local de «Unión por Alta Gracia», el partido político de Walter Saieg, que este viernes 24 de febrero, desde las 20, contará con una reunión de jóvenes en 3 de febrero esquina Urquiza.
Fuentes del saieguismo explicaron a este Portal que dicha reunión «fue organizada por jóvenes del espacio para coordinar actividades para el año y para la futura campaña» («para planificar las actividades de este nuevo sueño que compartimos», dice explícitamente la invitación).
Campaña anticipada
Paralelamente, en las redes sociales, la página de «Unión por Alta Gracia» publicó un posteo con tono de campaña electoral que promete «bajar en un 30% todos los impuestos y tasas municipales», como el de Servicio a la Propiedad, Automotor, Cementerio y Comercio, «para que las familias de Alta Gracia puedan aliviar sus bolsillos y destinen ese ahorro a salud, educación, a sus hogares, e incluso al esparcimiento».
«Los vecinos lo necesitan, Alta Gracia lo necesita, y lo vamos a hacer desde el primer día que asumamos», afirma la publicación, precediendo tres hashtags proselitistas.
El tablero local
Si bien el ex intendente y legislador departamental Walter Saieg no se ha pronunciado públicamente al respecto de este partido ni de una eventual candidatura suya, e incluso se ha mantenido lejos de las cámaras y los micrófonos; es vox pópuli su enfrentamiento político con los hermanos Torres.
Cabe recordar que en 2019 se partió el justicialismo local, cuando se aprobaron las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) en el Concejo Deliberante.
Tras amagar con presentar una propuesta propia, finalmente Walter Saieg no se postuló para la interna del Partido Justicialista y el torrismo logró incluir dentro de su propuesta para las Generales a las vertientes que comandaron Pablo Ortiz, el socialista Rodrigo Martínez y Ana Pinciroli.
Sumado al sector de Carlos Caserio a nivel provincial, vertiente identificada con el fallecido ex gobernador José Manuel De La Sota, que se alineó con el Frente de Todos a nivel nacional; Walter Saieg se licenció de la Legislatura para incorporarse a la gestión de Alberto Fernández como secretario de Transporte.
Ocupó dicho cargo hasta que en 2021, tras el fallecimiento de Juan Carlos Cimmadamore, volvió a su banca en la Unicameral, ya que Carolina Basualdo, quien lo reemplazaba en dicho espacio, ganó las elecciones municipales de Despeñaderos y dejó la silla departamental sin representación.
«Hace 20 años que me están votando. Si no vuelvo, dejo sin banca al departamento y políticamente no es lo correcto», dijo en ese momento Walter Saieg al diario La Voz del Interior.
En el camino, levantó el voltaje de la interna la disputa por la conducción del Partido Justicialista de Alta Gracia (e incluso la llave del local de calle Arzobispo Castellano).
Semanas atrás, la noticia sobre el lanzamiento de «Unión por Alta Gracia» volvió a meter el nombre de Walter Saieg en la agenda política local. Las elecciones locales no ocurrirán antes de septiembre, con el resultado de los comicios provinciales definidos e incluso tras las elecciones Generales Nacionales.
En virtud de ello, los movimientos que se observan en 3 de Febrero y Urquiza y el silencio del máximo dirigente del flamante espacio despiertan suspicacias, encienden alarmas, generan signos de pregunta dentro del mapa político altagraciense.
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