El jueves 12 de septiembre, mientras los movimientos sociales se manifestaban en las afueras del Congreso de la Nación, en la Cámara de Diputados, en el marco de una sesión especial convocada por los bloques opositores, se le dio media sanción a la Ley Emergencia Alimentaria con 222 votos afirmativos (incluido el oficialismo) y una abstención. Ahora el proyecto debe ser ratificado en el Senado para convertirse en Ley.
En el recinto, legisladoras y legisladores de la oposición expresaron su descontento con la situación social y económica actual, argumentando la necesidad urgente de que se implemente esta medida que busca garantizar mayores fondos públicos para que el Estado destine a combatir el hambre en todo el país.
En su exposición, el diputado nacional Daniel Arroyo destacó que la Ley de Emergencia Alimentaria pone «un piso a la caída social» y consideró que es evidente el problema del hambre y la malnutrición en Argentina. «Está claro que no es lo mismo comer que no comer. Hay una mayor demanda sobre los comedores, más chicos que se quedan a comer en las escuelas, lo cual aumenta la tensión social», argumentó Arroyo.
El legislador de Red por Argentina indicó que el proyecto pretende «atender lo básico: que haya alimentos en comedores y merenderos, reasignando partidas presupuestarias que aceleren los procesos de compra de alimentos» e «incrementado un 50 por ciento los fondos destinados a esto».
La diputada Victoria Donda, de Libres del Sur, desde una mirada con perspectiva de género, destacó que «la pobreza en este país la estamos pagando mayoritariamente las mujeres». Explicó que «las mujeres somos las que terminamos pagando la crisis con nuestro cuerpo, somos las que tenemos los trabajos más precarizados y las que terminamos haciéndonos cargo del hambre de nuestros pibes».
El diputado de Consenso Federal, Marco Lavagna, caracterizó la situación de crisis social en el país: «El problema de la pobreza es estructural y se va complejizando con los años. Fuimos naturalizando la pobreza, la cual hoy está por encima del 30 por ciento». Respecto a la implementación de la Ley, en caso de aprobarse, planteó la importancia de que se aplique correctamente: «No queremos que queden en el camino los recursos, queremos que vayan a donde corresponde».
Por otro lado, Mario Negri, diputado cordobés de Cambiemos, admitió la crisis estructural del país y manifestó el acompañamiento del macrismo al proyecto de Ley de Emergencia Alimentaria: «Es cierto que el Gobierno podría haber hecho la prórroga por DNU, pero el proyecto que está en discusión y vamos a aprobar si Dios quiere, que compartimos en términos generales, viene a plantear la prórroga hasta 2022, lo cual nos parece correcto que defina el Congreso».
Hubo 33 ausentes en el recinto y la Ley de Emergencia Alimentaria tuvo no contó con votos negativos, pero sí con la abstención de la diputada Mónica Schlotthauer, de Izquierda Socialista.
FUENTE: RADIO GRÁFICA Y AGENCIA FARCO
FOTO: AGENCIA TÉLAM
