Los sectores empresarios rechazaron la demanda de la CGT y las dos CTA, para que el Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM) dispusiera un piso de $572.000 en diciembre. En ese marco, el Gobierno, pese a manifestar que la paritaria es un «acuerdo entre privados», definirá por decreto el mínimo de los salarios del sector privado. El titular de la CTA Autónoma, Hugo «Cachorro» Godoy, denunció que «en lo que va de este gobierno, el SMVM ha perdido el 30% de su valor» y el investigador del Instituto de Estudios y Formación de la CTA – Autónoma, Luis Campos, alertó que «el salario mínimo está en el peor momento desde los años ’80».
Godoy apuntó que al pretender imponer el salario mínimo por decreto, el Gobierno de Javier Milei inhabilita «la posibilidad del diálogo tripartito». Asimismo, denuncia que «en lo que va de este gobierno, el SMVM ha perdido el 30% de su valor, y la propuesta del empresariado es de aumentar un 8.8%, medio kilo de asado por mes, un agravio a la ya angustiante situación que atravesamos los trabajadores».
En ese marco, consideró que hay una «actitud cómplice del poder empresarial con la política de un gobierno que gobierna por decreto».
Asimismo, reveló que además de discutir el salario mínimo, las entidades gremiales solicitaron abordar otras problemáticas graves del sector trabajador, como «el desempleo, la pérdida de empleo y la precariedad laboral que crece«. Pero para esto, subrayó, «necesitamos un consejo con un funcionamiento más regular».
«Cuando ha habido presidentes o autoridades de gobierno que se endulzan con esta práctica de gobernar por decreto o vetar las leyes que aprueba el congreso y no le gustan, esto termina en prácticas despóticas que son muy perjudiciales para el conjunto del pueblo. Los trabajadores hemos trabajado para tener una democracia participativa que resuelva las condiciones de vida de nuestro pueblo, entonces los trabajadores vamos a insistir en la defensa de esta democracia», concluyó, a través de un mensaje compartido en sus redes.
CONSEJO DEL SALARIO: UNA VEZ MAS VAN A DICTAR UN DECRETO INHABILITANDO LA POSIBILIDAD DEL DIÁLOGO TRIPARTITO
— Hugo Cachorro Godoy (@CachorroGodoy) December 19, 2024
En lo que va de este gobierno, el SMVyM ha perdido el 30% de su valor, y la propuesta del empresariado es de aumentar un 8.8%, medio kilo de asado por mes, un agravio a… pic.twitter.com/w0eXsuBxkV
Por su parte, el investigador Luis Campos, del Instituto de Estudios y Formación de la CTA – Autónoma, en una entrevista con radio Urbana Play, alertó que la decisión del Gobierno de clausurar el Consejo del Salario Mínimo, Vital y Móvil (SMVM) para decidir por decreto el piso de aumentos para el sector trabajador, «va en contra del discurso de que esto es un acuerdo de privados».
Analizó Campos que para mantener su proyección macroeconómica y su política de ajuste, el Gobierno tiene tomada la decisión de no convalidar aumentos salariales del 7 o el 8% mensual, y que está proyectando mantenerlas por debajo del 2 o 4%; y que no se acuerden aumentos más allá de enero; para «bajar el ritmo de incrementos nominales de salarios».
En una evaluación anual, Campos indicó que el escenario de aumentos de salarios es heterogéneo, con algunas ramas que le ganaron a la inflación, como estaciones de servicios, químicos, aceiteros y entidades deportivas; aunque señaló que comercio, que es uno de los sectores que concentra un mayor número de trabajadores y trabajadoras, perdió un 8% en términos reales. Otro de los sectores con importantes caídas fue el de la construcción, con una baja del 4% en la comparación interanual con noviembre de 2023.
Se trata, precisamente, de comercio y construcción, dos sectores cuyos rubros han recibido a lo largo del año los mayores impactos del ajuste y la recesión; con marcadas caídas de actividad y consumo.
Paralelamente, Campos alertó que peor está el personal del sector público que, aunque con diferencias según los distritos y estamentos del Estado, sufrió caídas de entre el 15% y el 25%.
Finalmente, Campos apuntó que el valor real del salario mínimo está un 30% por debajo de cuando empezó el año; y que se ubica un 55% abajo, en comparación con 2015. A continuación, sentenció: «El salario mínimo está en el peor momento desde los años ’80, no sólo en términos reales, sino también por el impacto que tiene sobre el resto de los salarios, ya que esto significa que los salarios más bajos de la economía no tiene piso».
Para graficar dicha afirmación, proyectó que «si el salario mínimo hubiera seguido a la inflación desde 2015 a la actualidad, hoy sería de 650 mil pesos».