Tanto la Asamblea de Pequeñas y Medianas Empresas (Apyme) como la Asociación de Empresarios y Empresarias Nacionales para el Desarrollo Argentino (ENAC) se pronunciaron con preocupación respecto a la estafa que se reveló en los últimos días, a partir del impulso que le brindó el presidente Javier Milei a la criptomoneda $Libra, que generó perjuicios directos millonarios a más de 70 mil usuarios. Cuestionaron particularmente la utilización de las pymes como falso sujeto beneficiario de la operatoria.
Para Apyme, «el criptogate no es un error, sino una consecuencia y un espejo del rumbo del gobierno«.
La entidad alertó sobre las posibles consecuencias políticas y económicas del hecho y resaltó particularmente que, al promocionar la dudosa criptomoneda $Libra, el Presidente escribió que se destinará al «fondeo» para las Pymes y emprendimientos: «Nada más alejado de las necesidades de las Pymes que el modelo que implementa el Gobierno, con ajuste, especulación financiera, destrucción de la industria y del mercado interno, inequidad tributaria, embargos y ejecuciones, aumentos de costos en insumos y tarifas«.
En ese marco, Apyme sentenció para concluir: «Este modelo en sí mismo constituye una estafa masiva a la producción, el trabajo y los sueños de millones de argentinas y argentinos«.
Desde la ENAC, en tanto, expresaron su profunda preocupación ante «el escándalo desatado por la promoción de la criptomoneda $Libra por parte del Presidente de la Nación Argentina, Javier Milei, que resultó en millonarias pérdidas para miles de ciudadanos e inversores«.
Acto seguido, advirtieron con elocuencia que «la irresponsabilidad en el ejercicio del más alto cargo del país no solo socava la confianza pública, sino que expone a la Argentina a una crisis institucional y económica de magnitud incalculable«.
A partir de dicho diagnóstico, demandaron la realización de un juicio político que esclarezca o ratifique la gravedad de lo sucedido.
«No solo estamos frente a un hecho de mal desempeño en el ejercicio de la Presidencia de la Nación, sino ante una estrategia perversa en la que Milei ha utilizado la institucionalidad del Estado argentino como pantalla para validar una operación fraudulenta, apelando al discurso de la inversión productiva para captar el interés de ciudadanos desprevenidos. En este marco, las pequeñas y medianas empresas fueron utilizadas como falso sujeto beneficiario de la operatoria, engañando a miles de inversores en el proceso», aseveró la ENAC.
«La producción y el trabajo no pueden ser utilizados como fachada para maniobras especulativas que solo benefician a unos pocos mientras perjudican a miles de ciudadanos y afectan la credibilidad del país en los mercados financieros«, concluyeron, en un comunicado en el que exigen explicaciones sobre el rol del Presidente en el «criptogate»; una investigación judicial exhaustiva, independiente y transparente; y que el Congreso de la Nación actúe en defensa de la institucionalidad y evalúe la pertinencia de iniciar un juicio político al Presidente.