En la siesta de este martes 3 de agosto concluyó el juicio por el femicidio de la joven anisacatense Aydée Palavecino en la Cámara en lo Criminal de 12ª Nominación de Córdoba, con la condena a prisión perpetua de Facundo Giménez. «Para hacer justicia por Aydée, tenemos que construir un mejor mundo para Olivia», dijo en su alegato Blanca Barreiro, la abogada de la madre de la víctima.
A las 16, y tras un largo cuarto intermedio de una hora y media, concluyó el juicio con la decisión del tribunal popular de condenar a la pena máxima a Facundo Giménez; el único acusado por el crimen. Se lo encontró penalmente responsable de los siguientes delitos: homicidio doblemente calificado por mediar relación de pareja y violencia de género por la muerte de Aydée Palavecino; homicidio calificado por el vínculo en grado de tentativa por el intento de asesinato de la hija de ambos, Olivia; homicidio calificado por violencia de género en grado de tentativa por el intento de asesinato de Graciela Cortez, la madre de Aydée; y homicidio simple en grado de tentativa por el intento de asesinato de Carlos Palavecino, el padre de Aydée; violación de domicilio y hurto simple agravado por uso de llave verdadera; y estafa.
Previamente, en esta última jornada se escucharon los alegatos. Blanca Barreiro, la abogada de la madre de Graciela Cortez, propuso la condena a prisión perpetua para Giménez, pero también hizo un llamado de atención a la sociedad, a la Justicia, al Estado en todas sus áreas y también a los medios de comunicación sobre la reproducción del sistema patriarcal y la cultura machista en todos los ámbitos. «Hemos llegado tarde porque la vida de Aydée ya no está», dijo Barreiro, señalando al Poder Judicial al referir que ante una condena previa de Giménez por violencia de género, no se le impuso un tratamiento acorde que pudiera evitar que volviese a incurrir en acciones de este tipo. «Eduquemos sujetos sanos», esgrimió Barreiro, enérgica y emocionada, para concluir su intervención con la siguiente frase: «Para hacer justicia por Aydée, tenemos que construir un mejor mundo para Olivia».
El abogado Agustín Saieg, por su parte, como querellante en representación del padre de Carlos Palavecino, calificó que este crimen fue cometido por un «ser siniestro y oculto que planificó todo lo que hacía». En esa calificación hizo referencia a que, en virtud de los elementos de prueba presentados, se determinó que Giménez tenía previsto terminar con la vida no sólo de Aydée, sino de la hija de ambos, Olivia, y de la madre y el padre de la joven.
Por su parte, el abogado defensor de Facundo Giménez, Santiago Caeiro, pretendió, recurriendo al testimonio y los informes de los peritos en Psicología y Psiquiatría que actuaron en este caso, enmarcar los crímenes como derivados de una supuesta patología psicótica de su defendido y un estado de emoción violenta generado por una supuesta discusión con los padres de la víctima. Asimismo, postuló un pedido de declaración de inconstitucionalidad del pedido del Ministerio Público Fiscal de que se aplicara la prisión perpetua a Giménez. Este último pedido fue desestimado y el intento de ceñir a los crímenes en un problema de salud mental no convenció a los jurados. Sí dispusieron que mientras curse la prisión perpetua, Giménez reciba un tratamiento sobre violencia de género y familiar, y para controlar sus emociones.
En sus últimas palabras, tras compartir una conversación a solas con su abogado, Giménez pidió disculpas a la familia de Aydée Palavecino y manifestó que nunca tuvo la intención de dañarla a ella ni a la hija de ambos.
Minutos después de las 16, Gustavo Reinaldi, quien presidió el Tribunal, acompañado de Ana María Lucero Offredi y María Gabriela Bella, anunció que el juicio había terminado.
FOTO: SAIRA ASÚA
La sentencia del juicio se puede ver en el siguiente vídeo: