El miércoles 30 de abril, desde la siesta, la Confederación General del Trabajo (CGT) se movilizará en la Ciudad de Buenos Aires, en la víspera del Día del Trabajador y la Trabajadora, acompañada por las dos CTA y la Unión de Trabajadores de la Economía Popular (UTEP). Entre las demandas al Gobierno Nacional, se encuentra la defensa del reclamo de jubilados y el personal de la salud y la educación; la crítica a la represión de la protesta social y los despidos; la demanda de paritarias libres; y la defensa de la industria y las empresas públicas.
La movilización concentrará a las 14 en la esquina porteña de Avenida Independencia y Perú, desde donde se marchará hasta el monumento al Trabajo, ubicado sobre Paseo Colón.
Adelantaron desde la CGT que la actividad incluirá una oración ecuménica en homenaje al Papa Francisco, fallecido el 21 de abril pasado.
En la marcha también habrá un repudio al acuerdo multimillonario del Gobierno Nacional con el Fondo Monetario Internacional (FMI), que exige medidas de profundización del ajuste sobre los sectores productivos, las trabajadoras y trabajadores y los jubilados.
“Como dijo el Papa Francisco, el trabajo es sagrado. Hagamos escuchar nuestra voz”, esgrime la convocatoria de la CGT.
A continuación, enumera las demandas que saldrán a la calle con esta marcha que se espera multitudinaria y que tendrá sus réplicas en todo el país: “Para darle voz y fuerza al reclamo de los trabajadores”, “para poner bien en alto nuestra bandera de la defensa del trabajo”, “porque no somos indiferentes al sufrimiento de nuestro pueblo”, “para que nuestros abuelos tengan una vida digna y para que nuestros hijos puedan soñar con un país más justo”, “para reclamar por quienes más sufren estas políticas de exclusión y ajuste”, “para que se deje de reprimir la protesta social”, “por paritarias libres y homologadas”, “para que no sigan echando trabajadores”, “en defensa de la industria, las empresas estatales, la educación y la salud” y “porque exigimos más equilibrio y justicia social”.
