Luego del rechazo judicial al amparo de los padres de Irene Cuevas, padres, familiares y acompañantes de la causa, marcharon 
hasta la sede de Apross en Marcelo T. de Alvear 758. Allí la única respuesta que tuvieron fue de un policía, contándoles que el presidente de Apross Juan Uez se encontraba de vacaciones.
«Antes uno podía ir a la justicia en estas cuestiones, ahora no tenemos adonde ir», reclama Juan Cuevas, el padre de Irene ante familiares y acompañantes en la sede de Apross. La niña, con múltiples discapacidades, recibía la cobertura de Apross desde que marzo de 2014. Desde momento incomprensiblemente se le negó la cobertura.
«Ocho años llevamos de lucha. En un primer momento, la jueza hizo una sentencia que se ajusta a leyes de discapacidad. Siendo una sentencia ejemplar. Pero desde ese momento se tomaron decisiones en contra”, explicó Cuevas en charlas anteriores con Tortuga 102.7.
“El tiempo corre en contra”
Irene concurre a una escuela de la ciudad y la reducción del tratamiento, entre otras consecuencias, juega en contra de la inclusión de la niña en el sistema escolar, ya que con la decisión pierde al acompañante terapéutico que trabajó con ella durante su etapa escolar en los últimos años.»Irene ya empezó el quinto grado y las instituciones nos eluden con esos artilugios», explicó el padre.
Mientras el año lectivo corre, la única respuesta que tienen los padres de Irene en la sede de Apross es una invitación a hacer un reclamo en la mesa de entrada del lugar. Ya lo han hecho varias veces.
