El miércoles 12 de abril, por la tarde, una numerosa columna de docentes de la organización «Pluricolor», que integra la UEPC, se movilizó por el centro de Alta Gracia en el marco de la «Marcha del Guardapolvo» para dar a conocer a la sociedad la situación apremiante que vive el sector, mientras rige una conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo.
Cabe recordar que en la última asamblea de representantes departamentales de la Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba (UEPC) se había dispuesto un paro de 72 en rechazo a una nueva propuesta del Gobierno de la Provincia, que no respondía a la totalidad de los reclamos salariales y laborales, y no devolvía los días descontados a los docentes por ejercer el derecho al paro.
Nora Fonseca, delegada departamental en Santa María e integrante de la Pluricolor UEPC, entrevistada por la Radio Tortuga 92.9, se refirió a la «Marcha del Guardapolvo» y a la situación crítica que vive el sector docente en la provincia de Córdoba.
«Bocina… bocina… bocina por la educación» fue una consigna que cantaron las docentes que se manifestaron y que generó una importante adhesión de automovilistas. En la esquina de Lozada y Belgrano, sobre la Plaza Solares, el cierre de la actividad contó con el canto del Himno Nacional.
«Hubo muchos afiliados, la gente saludaba y tocaba la bocina… Participó gente que no va habitualmente a movilizaciones», destacó Fonseca sobre la actividad.
Respecto de la Pluricolor, indicó que no se consideran necesariamente una organización opositora a la conducción, sino que tienen miradas y propuestas diferentes. Aclaró que defienden a la entidad gremial como herramienta para defender los derechos de las trabajadoras y los trabajadores, pero cuestionan algunas decisiones. «Tenemos otra mirada del gremio y desde adentro del gremio nos movilizamos», sintetizó.
También se expresó respecto de ciertas manifestaciones de la conducción gremial, que habían deslizado que operaban partidos de izquierda en sectores díscolos del sindicato: «Las escuelas no están politizadas, no están los partidos adentro. Cada quien es libre de adherir a tal o cual pensamiento, pero hay una situación grave y no hay respuestas».
Sobre la situación actual de la educación, dijo: «Las escuelas son mantenidas por los docentes, que ya no pueden más. Sabemos que el problema es general, pero la educación es el futuro».
Afirmó que de los gastos habituales en las escuelas, «todo sale del bolsillo y el tiempo del docente» y que, en contraposición, «los sueldos no alcanzan para cubrir la canasta básica».
En ese marco, considerando a ésta como una problemática social que excede a un reclamo gremial, concluyó: «Un docente mal pago es educación de mala calidad».