La poeta local Claudia Tejeda, en esta cuarentena, nos hace una invitación a sumergirnos en sus textos, una vez más el arte nos salva, eterna herramienta de resistencia, de amor y lucha.
Todo está en la mirada
cuando el ojo levanta los pisos
hasta el humus que dejaron las lombrices
hasta esa puerta que no debía abrirse
al menos hoy tampoco
porque los demonios tienen
la mala costumbre de beberse el té
y orinar los rincones
para marcar territorio.
Chau.
Levantemos la cabeza
hasta mirar bien de frente
lo que nos trae este viento
en la quiromancia de sus remolinos.
Si. Ya sé.
Los ciegos nos llevan ventaja
pero podemos aprender a leer
poner a funcionar la mirada del tacto
de los otros sentidos
hasta el balbuceo
hasta la esencia
del primer despojo.
