Raúl Soria es un artista oriundo de la provincia de Catamarca que desde hace varios años habita el suelo del Valle de Paravachasca, el cual está presente en diversos dibujos y murales de su autoría. En una entrevista para el programa radial “Quiero Re Trucco” de Radio Tortuga 92.9, el dibujante hizo un repaso por su carrera.
Raúl Soria es un reconocido dibujante y muralista que habita en el Valle de Paravachasca, y cuyas obras pueden encontrarse en diferentes puntos de la provincia de Córdoba. En una entrevista para Radio Tortuga 92.9, el artista comentó ser oriundo de Catamarca pero que de adolescente arribó a las sierras cordobesas para probar suerte como basquetbolista.
Su desempeño como deportista le dio la oportunidad a los 15 años de comenzar una vida en Córdoba para desempeñarse en el mundo del Básquet, llegando con el tiempo a vivir del deporte. Sin embargo, hoy Raúl dejó el básquet y encuentra el alimento de su talento en el dibujo: “Encontre un placer que no me daba el deporte, es algo que estoy descubriendo y en el básquet sentía que ya había alcanzado mi límite”.
El artista comenzó a dibujar de muy pequeño “cuando tenía cinco o seis años”, sus compañeros de primaria le pedían siempre que les dibujara, por lo tanto considera que ese talento estuvo siempre allí “latente”.
Luego de vivir casi 20 años del deporte, decidió dejarlo para comenzar a dedicarse a la ilustración, actividad en la que siente que fluye: “En el dibujo siempre supe como resolver desde algo pequeño hasta algo grande, es algo que me daba cuenta que lo resolvía bien, no tenía dificultades. Cada uno tiene un campo en donde tiene algún talento y sabe como hacer algo con eso. Por eso está bueno alentar esos talentos desde temprano”, expresó.
Radio Tortuga 92.9 (RT): ¿Extrañas Catamarca?
Raúl Soria (RS): “Hoy estoy más cordobés que catamarqueño, me gusta volver de vez en cuando, pero no tengo esa cosa de nostalgia. Estoy muy enfocado en lo que estoy haciendo y me gusta la vida que tengo ahora. Cuando vuelvo a Catamarca disfruto de lo que hay en el momento, no soy muy amigo de la melancolía.
RT: En tus comienzos, cuando recién empezaste ¿Copiabas a otros artistas, o tenías ya tu propia estética?
RS: Yo me alimente mucho de dibujar a otros dibujantes, es algo que me entretiene mucho. Desde que leía historietas cómicas de Patoruzito o Clemente, pasando por los grandes de la historieta argentina, me gusta dibujarlos e ir explorando sus trazos, su estética, sus yeites, y eso está bueno porque lo incorporas.
RT: ¿Preferís la soledad para trabajar o te llevas bien cuando hay público presente?
RS: Siempre hay buenas respuestas, si bien se da mucho en los dibujantes que no quieren que vean el dibujo antes de que esté terminado, a mi me pasa lo contrario, siento una electricidad, una vibración del otro que mira cómo aparecen las formas, que se sorprende, y mucho más los niños, los niños se te quedan mirando hipnotizados.
