El 21 de Junio, es el comienzo del invierno en nuestro continente, pero para los pueblos originarios, este momento del año, es mucho más que un cambio de estación.
A Lo largo de miles de años, las culturas precolombinas tomaron esta época como un ritual, en la actualidad se sigue celebrando. En el Valle de Paravachasca se llevan adelante diferentes celebraciones.
La noche más larga, el día más corto
Se sabe que la tierra esta inclinada a 23,5 grados respecto del sol, esto hace que los hemisferios norte y sur reciben cantidades desiguales de luz solar durante el año mientras orbita alrededor del sol.
Es el momento en que esta inclinación se encuentra en su máximo esplendor, produciendo este fenómeno que en nuestro continente llamamos “Solsticio de Invierno” donde la noche es la más larga y el día es más corto.
Celebraciones del año nuevo “original” del hemisferio sur
Durante miles de años, los pueblos originarios de nuestro hemisferio, tomaron esta época del año como ritual. Hay diferentes ceremonias que se realizan con significados similares y en relación a las cosechas y a la limpieza del alma*
Inti Raymi (Fiesta del Sol): Es una ceremonia religiosa del Imperio inca en honor del dios sol Inti. También marcó el solsticio de invierno y un nuevo año en los Andes del hemisferio sur. Una ceremonia realizada por los sacerdotes incas era la vinculación del sol. En Machu Picchu aún hay una gran columna de piedra llamada Intihuatana, que significa ‘picota del Sol’ o, literalmente, ‘para atar al Sol’. La ceremonia para atar al sol a la piedra era impedir que el sol se escape.
Tiahuanaco: Los aimaras celebran el 21 de junio de cada año en la ciudadela preincaica de Tiahuanaco el «Willka Kuti», o «retorno del sol». Cientos de personas, visitan a primera hora el templo de Kalasasaya de Tiahuanaco, para asistir a la conmemoración coincidente con el solsticio del invierno austral y el cambio del ciclo agrícola para la siembra en el campo. Se toma como año 0 el 3508 antes de la Era cristiana.
We Tripantu (siendo we tripantu: ‘nuevo año’ o ‘nueva salida del sol’ en idioma mapuche): Es la celebración del año nuevo mapuche que se realiza entre el 21 de junio y el 24 de junio en el calendario gregoriano. Conforma la noche más larga del año y el momento en que el sol recupera su fuerza y la tierra comienza a renacer. La celebración consiste en velar en familia durante la noche, esperando el amanecer. Al aparecer el sol se le da la bienvenida y se practica un baño ritual en un río.**
Solsticio de Invierno en el Valle de Paravachasca
Dentro de la comunidad de nuestro valle, vecinos y vecinas se autoconvocan para recordar y celebrar este ritual ancestral.
En la zona de Anisacate, a través de un evento en redes sociales, vecinos y vecinas invitan a participar de la festividad
«Solsticio de invierno, la noche más larga del año y el día más corto del año. El día le empieza a ganar espacio a noche y renace la esperanza, la vida, para la siembra y las cosechas. El verde, las lluvias y el abrigo del inti sol regresan lentamente. Nos reunimos para festejar en el patio de Consti Prieto, en Av. Gral Paz esq. alejo Guzman a una cuadra de la plaza los tronquitos”, indica la invitación.
Por su parte, en Alta Gracia, la comunidad Comechingona brindará una charla informativa en el Museo de Antropología Municipal. La misma será este viernes 21 a las 16:30 horas en la sede el museo, en calle Olmos 167, con entrada libre y gratuita.
En diálogo con Radio Tortuga 92.9, Elvio Altamirano integrante de la comunidad Comechingona Paravachasca expresó:
“Hace unos cuatro años que nos hemos organizado y hemos resurgido como comunidad indígena, en esta lucha del rescate de nuestra esencia, cultura y memoria, estamos en ese proceso contra viento y marea”
Con respecto a la difusión de esta cultura opinó:
“Entendemos que es importante, recordar, visibilizar e reinstalar las tradiciones nuestras, la recuperación de la memoria, las costumbres de nuestra gente, son momentos donde hay que hacer revisionismos históricos, para poder reinstalar nuestra verdadera cultura”
Sobre la realización de la ceremonia expresó:
“El Vuelo del nuevo sol, consiste en hacer cuatro fuegos, uno apuntando a cada punto cardinal, en donde hacemos la ceremonia inicial de llamar a los ancestros de los cuatro puntos cardinales para que nos acompañen en la celebración y esperar toda la noche al primer sol del año cuando amanece, le agradecemos por haber vuelto, le pedimos cosas que uno necesita. También hacemos ofrenda durante la noche, para sanear nuestro espíritu y acomodarnos sobre nuestro eje”
*Fuente: National Geografic
**Fuente: Portal Los Andes.com