Tras un accidente fatal, ocurrido el jueves, desde el viernes a la noche, cientos de vecinos de Villa Parque Santa Ana cortaban la autovía provincial Alta Gracia – Córdoba, con mensajes como «ni una muerte más» y «una muerte que pudo ser evitada». Tras la presencia en el corte del fiscal emilio drazile, el intendente José Luis Becker y funcionarios de la empresa Caminos de las Sierras, el sábado comenzaron las obras y los vecinos levantaron la medida de fuerza.
La convocatoria se originó tras el fallecimiento de una joven de 22 años que intentaba cruzar la ruta y fue atropellada por una Toyota Hilux. La víctima, reconocida como Mariana Sanquilán, era vecina de Santa Ana y estaba embarazada. El viernes por la noche se hicieron presentes el Fiscal de Alta Gracia, Emilio Drazile, personal de la Policía Departamental Santa María y representantes de Caminos de las Sierras.
La protesta tuvo dos pedidos concretos: la construcción de una pasarela para el cruce de la autovía y la puesta en funcionamiento de un puesto policial de control en cercanías a la localidad de Santa Ana. El sábado continuaba la protesta de vecinos sobre ruta 5. El corte continuará durante todo el fin de semana hasta encontrar una solución.
La noche del viernes, testimonios de los vecinos advertían que el corte se mantendría hasta que se comenzaran las obras solicitadas. «Siempre los que tenemos que esperar, los perjudicados, somos nosotros; ahora que pierda Caminos de las Sierras», expresaba un vecino. «Cuando hay carreras en el circuito del Cabalén, los que asisten a ver las carreras, salen con los autos como si estuvieran en la pista de carreras», denunció otro.
Entre los vecinos presentes, había opiniones dispares, respecto a la solución del problema. Algunos pedían pasarelas peatonales, pero otros manifestaban que debía pensarse en la gente con problemas de movilidad. Otros vecinos pedían bandas reductoras de velocidad y control policial permanente las 24 horas.
El ingeniero Luis Alberto Escobar, de la empresa Camino de las Sierras, se comprometió públicamente, ante los vecinos y los medios de comunicación, que iniciarían las obras el lunes 15. «No sé la normativa de los reductores de velocidad para autovías, pero lo que proponemos colocar son bandas ópticas sonoras, para que los vehículos reduzcan la velocidad», dijo el funcionario. La duda que quedaba entre los presentes era que si tan rápido se podían poner en marcha las obras, si era necesario un accidente fatal de estas características.