En la antesala del paro convocado para este lunes 17 y martes 18 de marzo por el Frente Sindical de Universidades Nacionales (que nuclea a autoridades, personal y estudiantes), el Comité Ejecutivo del Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) expresó su «profunda preocupación por la crisis presupuestaria» que atraviesan las casas de altos estudios por la «falta de actualización de los gastos para su funcionamiento». En ese marco, demandó la «urgente e imprescindible recomposición salarial para docentes y no docentes» y la «reconstrucción del sistema de investigación, ciencia y tecnología»; la «reinversión en infraestructura universitaria» y la «actualización del sistema de becas» para el estudiantado.
En la reunión que mantuvieron el 12 de marzo rectoras y rectores de universidades públicas de todo el país, se manifestó la «honda inquietud por el incumplimiento de principios y regulaciones previstos en nuestra Constitución Nacional y las leyes que la reglamentan».
A través de un comunicado, titulado «Nuevo año, los mismos problemas», el CIN denunció que «por manifiesta voluntad del gobierno, la administración nacional y el sistema universitario público argentino no cuentan con un presupuesto para el ejercicio del 2025».
Explicó el cuerpo que «esto significa que el Poder Ejecutivo Nacional puede disponer discrecionalmente, sin ningún tipo de control, de los fondos que surgen del pago de los impuestos que realiza cada argentina y cada argentino»; lo que representa que «el país no cuenta con una hoja de ruta que garantice el funcionamiento económico y financiero de las instituciones del país».
En este contexto adverso, advirtieron que el sistema universitario público argentino atraviesa una seria situación de desfinanciamiento en todos los ámbitos de su desempeño institucional y que «los problemas que señalamos en febrero de 2024 continúan e, incluso, en varios aspectos se han agravado».
Detallaron a continuación que «las paritarias salariales no funcionan y los magros incrementos otorgados por decreto, lejos de recomponer la pérdida del poder adquisitivo de los salarios, continúan agravando la situación con aumentos por debajo de la inflación»; que «las becas estudiantiles están congeladas desde agosto del 2024 y sus montos están alejados de cubrir necesidades mínimas»; que «los recursos que se destinan al funcionamiento de nuestras casas de altos estudios apenas alcanzan a un 50 % para el 2025»; que «el sistema de investigación, ciencia y tecnología que, en su inmensa mayoría, reside en las universidades nacionales, es víctima de una drástica reducción de recursos que parece tener por objetivo abortar el desarrollo científico y tecnológico autónomo de nuestra Nación»; y que «obras de ampliación, mejora y mantenimiento de la infraestructura universitaria están totalmente paralizadas, dejándolas libradas a los posibilidades económicas de cada institución».
A partir de lo descripto, las rectoras y rectores pidieron de manera «urgente» buscar en conjunto con las autoridades del Gobierno Nacional «generar las alternativas de solución a los problemas».
Finalmente, el CIN expresó un «llamamiento a las comunidades universitarias de todo el país a seguir trabajando en defensa de la democracia, de la educación pública y del sistema universitario público argentino, y a reforzar el dialogo con nuestras comunidades para poner en valor los aportes de la educación, la investigación, la ciencia y la tecnología para el desarrollo nacional».
Y desde una exhortación al diálogo y el consenso, consideraron imprescindible «Tenemos la convicción de que debe primar el diálogo y el consenso. Consideramos imprescindible «la unidad nacional por sobre la cultura de la provocación y el conflicto, para construir un proyecto de país independiente y solidario».
«En un mundo en el que el conocimiento es presente y futuro, es INCONCEBIBLE e IMPERDONABLE no invertir en educación como país», concluye el comunicado.