El vocero del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata) Córdoba, Javier García, entrevistado por la Radio Tortuga 92.9, confirmó que desde julio, en la planta ubicada en el barrio capitalino de Santa Isabel, Renault y Nissan reducen a seis horas cada turno de trabajo para hacer frente a una caída en la producción que se profundiza, generando amplios perjuicios sociales.
Repasó García que a fines de marzo, Renault anunció que sólo trabajaría en un solo turno y se produjeron retiros voluntarios, con la esperanza de que, en línea con lo anticipado por el Gobierno Nacional, la economía emprendiera una recuperación. Sin embargo, la sostenida profundización de la crisis económica obligó al sector automotriz a pensar medidas que resguarden los puestos de trabajo, al menos hasta fin de año.
«Ahora, en teoría, estábamos en la punta de la ‘v corta’ y empezaba a crecer, pero esa situación está lejos de ocurrir. La economía se está complicando. Para el rubro nuestro genera que no se compren vehículos, ya que ha caído mucho la venta y afecta a las empresas», graficó García.
Frente a este panorama, explicó el vocero de Smata la medida que se acordó con las firmas: «Una de las herramientas que se buscó desde el sindicato y se llego a un acuerdo con las empresas es hacer una reducción horaria para mentener los puestos de trabajo. En Santa Isabel, tanto Nissan como Renault están trabajando turnos de seis horas a partir de julio. En Renault un solo turno y en Nissan dos turnos. De la mano de esto, hay estabilidad laboral hasta el 31 de diciembre. La idea es pasar estos meses, esperando que la situación a nivel país mejore».
Agregó García que esta medida se viene implementando también en la planta de Iveco y alertó García que la gravedad de la situación se expande también a las autopartistas que trabajan exclusivamente con estas marcas. «Termina impactando en una economía popular que se genera alrededor de cada gran empresa y afecta hasta al tipo que vende criollos en la puerta de calle, a los transportes, al del kiosco. Este desempleo golpea a la economía popular», remarcó.
Hacia 2025, el gremialista anhela que se concrete la anunciada recuperación económica, aunque advierte que tiene que haber un incentivo a la producción y una restricción a las importaciones, para poder competir en «igualdad de condiciones»; destacando que en lo que va de 2024, se maneja una caída de las ventas de cerca del 23%, en comparación con 2023.
Finalmente, también vio con preocupación la relación tensa que mantiene el presidente Javier Milei con Luiz Inacio «Lula» Da Silva, su par de Brasil, uno de los principales socios comerciales del país. Y también observó con preocupación que el Presidente habla de eliminar el Estado, lo que vuelve «difícil que una empresa quiera venir a invertir».
