En la mañana del miércoles 26 de octubre, el intendente Marcos Torres se presentó en la sesión del Concejo Deliberante junto al secretario de Obras Públicas, Marcos Moreira, dispuesto a brindar explicaciones sobre el trabajo en la laguna de Potrero de Loyola. Sin embargo, la oposición cuestionó su aparición intempestiva y el intendente se terminó retirando.
Días atrás, fuentes del bloque Alta Gracia Crece habían adelantado a la prensa la intención de convocar al intendente al recinto legislativo para interpelarlo sobre la rotura en un tramo de la obra que se realiza en Potrero de Loyola que cuestionaron oportunamente.
Precisamente, mientras se discutía este punto irrumpió de manera sorpresiva Marcos Torres, junto al secretario de Obras Públicas, y se ubicó junto a la viceintendenta Cristina Roca. El hecho sorprendió a propios y ajenos, y el bloque opositor pidió un cuarto intermedio para evaluar cómo seguir.
De vuelta en pleno debate, con evidente malestar la radical Amalia Vagni afirmó que el intendente no podía tomar la palabra si todavía no había sido invitado. El edil del Pro, Ricardo González, por su parte, demandó una aclaración respecto de a qué se debía la visita del intendente.
En rigor, si bien el bloque Alta Gracia Crece había anticipado que solicitaría la presencia de Torres en el recinto, todavía no la había formalizado. Empero, con suspicacia el oficialista Roberto Urreta les endilgó a sus pares opositores que si tanto venían insistiendo en que Marcos Moreira debía brindar explicaciones al Concejo, ahora lo tenían por fin enfrente para escucharlo.
En medio del encendido cruce entre oficialismo y oposición, al advertir que no se le permitía el uso de la palabra, Marcos Torres se levantó de su silla y, anunciando que se expediría posteriormente a través de una conferencia de prensa, se retiró junto a su secretario.
Acto seguido, Ricardo González tildó de «artista» al intendente, considerando que su presencia en el recinto legislativo fue una actuación; y Amalia Vagni interpeló al presidente del bloque Hacemos por Córdoba, Pedro Spinetti, por no informar oportunamente sobre la visita de Torres.
Los oficialistas Annemie Busse y Manuel Ortiz calificaron como «una vergüenza» y «un mamarracho» a lo ocurrido, respectivamente.
Cabe precisar que se había generado expectativas respecto del impacto que podría tener en la obra de la laguna de Potrero de Loyola la copiosa lluvia que se esperaba (y en efecto arribó) entre la noche del martes y la madrugada del miércoles. Sin embargo, el mismo Marcos Moreira aseguró a este portal que con el mismo intendente corroboraron que «funcionó a la perfección tanto la laguna como el canal» y que no hubo complicaciones.
