La «Asamblea Federal de Teatro» emitió este sábado 31 de mayo un comunicado en el que alertó que la decisión del Gobierno de Javier Milei de eliminar la autarquía del Instituto Nacional del Teatro (INT) es un «golpe al corazón del teatro independiente». La medida del Gobierno Nacional fue efectivizada a través del Decreto 345/2025 y según la Asamblea, «no se limita a un ajuste administrativo: desmantela una estructura participativa y federal que durante casi tres décadas sostuvo al teatro independiente argentino».
Repasa el comunicado que el INT fue creado en 1997 por la Ley Nacional del Teatro 24.800 y concebido como un organismo descentralizado, con financiamiento propio y recursos garantizados por ley. «Aunque su presupuesto representa apenas el 0,2% del total nacional, el sector cultural genera un valor agregado del 1,8% anual», subrayan confrontando la retórica del Gobierno Nacional, a través de la cual intenta justificar sus ajustes.
«Solo en 2023, el Instituto aprobó 1.475 aportes por más de 682 millones de pesos, alcanzando a más de 47 mil trabajadores y trabajadoras registrados/as y beneficiando a 240 localidades de todo el país con funciones, festivales, giras, capacitaciones, publicaciones y redes de acción territorial», detalla la Asamblea.
Y agrega: «El Decreto 345/2025 vacía una política pública que ha sido fundamental para el desarrollo del teatro como expresión cultural, democrática y federal».
Puntualmente, se cuestiona la decisión de eliminar el Consejo de Dirección, que deja de ser quien toma las decisiones de todo el país para pasar a ser un mero espacio de asesoría Ad Honorem, disolviendo las representaciones provinciales y del quehacer teatral.
Con esto, advierten, se transforma al Instituto en una simple “unidad organizativa” dentro de la Secretaría de Cultura, centralizando decisiones y desconociendo el trabajo que se realiza en los territorios, que responden a las necesidades de las comunidades. También se debilita el trabajo de salas, artistas, gestoras y gestores, técnicas y técnicos y «rompe con una forma de organización que garantiza equidad, diversidad y acceso a los derechos culturales de todo el país».
Además, apunta la «Asamblea Federal de Teatro» que «se desmantelan programas estratégicos vinculados a la formación, la accesibilidad, las políticas de género y diversidad, la producción editorial y la representación internacional, que durante años construyeron una cultura plural, inclusiva y profundamente arraigada en los territorios».
Finalmente, aclaran, para desagraviar al sector de los prejuicios impuestos desde el Gobierno respecto al financiamiento de la actividad cultural, que «el INT no depende del Tesoro Nacional ni de aportes directos de la ciudadanía», y que «su financiamiento proviene de recursos propios establecidos por ley: el 10% sobre publicidad en medios (ENACOM) y el 31% del impuesto a premios de juego (LOTBA), de los cuales un 95% del total es aportado por ENACOM».
«Por lo tanto, no existe justificación técnica, presupuestaria ni administrativa que avale las modificaciones impuestas por este decreto», enfatiza el comunicado.
Frente a lo que califican como un «atropello», desde la Asamblea llaman a la movilización y a la organización colectiva: «Las asambleas abiertas se multiplican en espacios culturales de todo el país, impulsadas por una palabra que hoy nos une: RESISTENCIA. Porque lo que está en juego no es solo un organismo, es una concepción de la cultura como derecho y no como gasto. Y es clave señalar que esta Ley no existe solo para quienes hacemos teatro, es una herramienta para el público argentino, porque garantiza el acceso a una política cultural que promueve la creación, circulación y democratización del hecho teatral en todo el territorio».
En defensa del teatro independiente y todas las expresiones culturales, se están presentando amparos judiciales y convocando a diputadas, diputados, senadoras y senadores para que se pronuncien en contra de este decreto, entendiendo que un instrumento del Poder Ejecutivo no puede modificar una Ley Nacional vigente.