Pabla es una cantante altagraciense que acaba de lanzar su EP “Nada en tu sal”, continuador de dos sencillos echados a rodar a las plataformas virtuales en 2020. En esta entrevista con el programa “Tarde para Tirar la Toalla” de la Radio Tortuga 92.9, cuenta cómo se reencontró con la música que la cautivó desde chica y se aventuró a dar a conocer sus composiciones en un proyecto artístico tan personal como intenso y reciente.
“Nunca imaginé que iba a llegar a donde llegué”, inicia la charla Pabla, desnudando la sorpresa que todavía le causan las repercusiones que vienen generando las canciones que ha subido a BandCamp, YouTube y Spotify. “De hecho, cuando me invitaron al programa pensé que me iban a hacer preguntas para las cuales no tengo respuestas, porque no sé cómo llegué. Me puse a pensar en el camino y acá estoy”, confiesa.
Esa duda expresada, sin embargo, contrasta con la firme decisión que tomó un año atrás cuando se topó con la certeza de que sus primeras composiciones se iban convirtiendo en canciones capaces de saltar el cerco de su propia intimidad. “Fue muy rápido, en eso fue muy directa”, ratifica.
Pabla nació en Alta Gracia y utiliza su nombre de pila para diferenciarse de su otro yo con apellido (Brizuela), que se desenvuelve profesionalmente como psicóloga. Su acercamiento a la música, repasa, tiene como primer guiño a su papá guitarrista: “Él me transmitió el gusto por la guitarra”. Más adelante, cita otro eslabón este camino: “Tuve un lindo encuentro con una seño de música en la primaria. Transmitía mucho su pasión por la música, le gustaban los Beatles y me prestaba cassettes para que me llevara a mi casa. Nos llevaba canciones en inglés para aprender. Por eso también después me gustó mucho el rock en inglés. Me gusta mucho la fonética. En la adolescencia caí en el rock alternativo y en el grunge. Ella me mostró ese universo de canciones”.
RADIO TORTUGA (RT): En esa adolescencia de la década de los ‘90 en la que aparecen esas canciones, ¿empezás a tocar?
PABLA (P): No, yo me refugié mucho en el grunge porque me pasaban cosas y fue mi gran refugio. A los 18 años quise tomar clases y no tuve buenos encuentros con los dos profesores con los que me crucé, que eran muy clásicos, ortodoxos. Tenían ese discurso del virtuosismo; eso de que para ser buena guitarrista había que tocar ocho horas por día y aprenderse todas las escalas. Y yo quería aprender a tocar los temas de Nirvana. Eso me ahuyentó y me frustré. Entonces estudié Psicología y dejé la música.
Hace unos tres o cuatro años volvió a partir de una necesidad personal, un deseo “bien fuerte” de retomar el camino musical, por lo que comenzó a tomar clases con Juan Carlos “Juanca” Moreschi. “Con él tuve un lindo encuentro, es muy amable y respetuoso del proceso de cada una. Tiene en cuenta mis intereses”, destaca y cita que también empezó canto otra profesora con el mismo perfil: Gabriela “Gaby” Garay. “Dos años atrás no cantaba ni el ‘Feliz Cumpleaños’ y con ella también tuve un re lindo encuentro”, destaca.
RT: Este aprendizaje de tocar la guitarra y cantar, ¿tenían como horizonte sacar canciones propias, grabarlas y difundirlas?
P: ¡No! Yo quería hacer covers para distracción. Me hacía bien, era un cable a tierra tocar la guitarra y aprender canciones.
RT: ¿Cómo apareció la composición de canciones propias?
P: Yo venía aprendiendo y… pasó la pandemia. ¡Boom! Nos obligaron a encerrarnos y aproveché para meterme para adentro e ir a buscar. Me analizo hace muchos años como practicante del psicoanálisis. Soy muy introspectiva, pero me fui más para adentro para expresar y saber qué hacer con muchas marcas de la vida que estaban ahí y se fueron convirtiendo en canciones.
RT: ¿Qué operó en vos para que se te ocurriera armar algo con esas canciones?
P: El reencuentro con la música fue con mis “treintaialgo” de años. Pensé que estaba llegando medio tarde y no tenía mucho tiempo. Si no era ahora, no iba a ser nunca. Entonces empecé el año pasado a componer, en marzo o abril, y me rodeé de gente que me favoreció para poder grabar. Juan (Moreschi) que me produce y me graba. Me encantó el resultado y por eso lo compartí. Hay dos sencillos que largué el año pasado, en agosto y en octubre, y el EP de cuatro canciones que largué el 4 de junio.
RT: ¿Qué respuesta venís teniendo?
P: Me sorprenden las repercusiones, que me inviten de radios. Hay gente que conozco que me da su devolución y gente que no sé de dónde sale y también viene y me dice cosas de la letra y de la música o me pregunta por qué salió tal tema o cómo hice para grabar. Gente que se sorprende y me transmite su curiosidad.
RT: El sonido tiene mucho de canción de rock. ¿Es algo que estás buscando?
P: Van apareciendo. Me cuesta encasillarme, soy muy de explorar y de ir de un extremo a otro; de un tema tranqui a querer romper todo con la distorsión. El rock alternativo abarca mucho. Soy una exploradora de la canción libre. Después capaz que viene otra cosa. Me gusta ir jugando con las distintas sonoridades.
RT: ¿Tenés ganas de hacer shows en vivo con estas canciones cuando se pueda?
P: La verdad es que me da un poco de miedo todavía. Una vez participé de una presentación con compañeres de canto en Cañito Cultural. Hay gente que me quiere acompañar y es bien recibido el acompañamiento. Estoy empezando a ensayar y pensando cómo podría ser la puesta en escena.
RT: ¿Emocionalmente cómo te pega todo esto?
P: Me siento como en una montaña rusa de emociones. Por ahí digo “qué lindas repercusiones” y en otro momento, “¡qué miedo! ¿qué estoy haciendo acá?”. Hay que jugársela para escribir y cantar muchas cosas que te dejan al descubierto.
RT: ¿Estás preparando algo nuevo?
P: Tengo un par de letras escritas a las que les faltan música. Estoy disfrutando esto, pero tengo algunas ideas.
RT: En los tiempos en los que empezaste a escuchar música, el horizonte de las mujeres en la música, y particularmente en el rock, era diferente al de hoy. No era común ver mujeres en el rock. Sobresalían las que eran muy particulares y lograban alguna oportunidad para estar. Hoy las luchas feministas están permitiendo que muchas chicas y mujeres grandes tengan mayor visibilidad y espacios. ¿Te sentís parte de todo eso, sentís que eso te ha empujado también?
P: Sí. Viendo lo que me ocurrió en el pasado con estos dos profes, influenciados también por el patriarcado en esa idea del hombre guitarrista que es un genio. Hay otras creaciones que no tienen que ver con tocar rápido y canciones de cuatro acordes, hay un montón de mujeres… Yo también escuchaba bandas y voces masculinas, y en estos últimos años empecé a escuchar más a las mujeres. ¿Por qué a PJ Harvey no la escuchaba si es una capa? ¿O a Courtney Love? Fui escuchando muchas mujeres en este proceso de construcción propio. Como mujer, en el rock que está emergiendo me siento parte y quiero sumar a eso. A mi edad por ahí digo “¿qué hago acá? Vaya a su casa, señora. ¿Qué hace gritando con la guitarra?” Y me digo, “No… ¡Animensé! Hay muchas mujeres con propuestas interesantes y hay que escucharlas”.
Escuchá la entrevista completa:
PABLA EN LAS PLATAFORMAS VIRTUALES:
BANDCAMP: https://pablab.bandcamp.com/
SPOTIFY: https://open.spotify.com/artist/47VL1faDJ6SQ6kfI9Yorcb