Entrevistado por el programa «Tarde para Tirar la Toalla» de la Radio Tortuga 92.9, el ministro de Gobierno de la Provincia de Córdoba y ex intendente de Alta Gracia, Facundo Torres, ponderó positivamente la gestión provincial de la pandemia. De cara a las próximas elecciones, caracterizó a Hacemos por Córdoba como una estructura de «pragmatismo provincial» que puede recibir a dirigentes del Frente de Todos, pero no sumarse al proyecto del peronismo nacional.

RADIO TORTUGA (RT): ¿Qué evaluación vienen haciendo de la evolución de la pandemia en la Provincia como para anunciar la vuelta de la presencialidad escolar desde el 25 de julio y ciertas flexibilizaciones para las vacaciones de invierno?
FACUNDO TORRES (FT): Después del pico que hemos tenido de esta segunda ola, sobre todo a fines de mayo y principios de junio, hemos alcanzado a este momento una tendencia a la baja en la curva de contagios y en la congestión del sistema sanitario. Debido a ello, hemos extendido una semana más las medidas restrictivas para consolidar esta situación y seguir avanzando con el calendario de vacunación. El 9 de julio se da inicio formalmente a la temporada turística y se toman determinadas medidas, teniendo en cuenta la situación actual de la pandemia. En el momento más álgido del pico de la segunda ola, estábamos casi en un 85 por ciento de ocupación de camas críticas; hoy no pasamos el 50. La cantidad de contagiados era de cinco mil por día, hoy estamos entre dos mil y dos mil quinientos. Los casos activos rozaban los 35 mil y actualmente variamos entre 18 y 22 mil. Esta situación, que lógicamente nos va dando algún tipo de garantías de que la pandemia está en una tendencia a la baja en la provincia, nos permite empezar a flexibilizar de mejor manera algunas cuestiones para alivianar la presión en el sistema comercial y que la gente pudiera volver a ser lo que siempre hizo y que en virtud de la pandemia tuvo que modificar.
Torres defendió la prohibición absoluta de las reuniones sociales y familiares, tanto en ámbitos cerrados como al aire libre, al apuntar que el 72 por ciento de los contagios se dan en ese tipo de encuentros. Asimismo, se mostró optimista respecto del movimiento que esperan se genere con la llegada de turistas en vacaciones de invierno. “Pasamos la temporada de verano con una gran afluencia de turistas, una muy buena temporada y los protocolos en muchos lugares se cumplieron. Vamos a trabajar con los intendentes, que son la polea de transmisión para el esquema sanitario provincial”, adelantó Torres.
RT: Hubo un momento en que la provincia de Córdoba tenía un crecimiento de casos que iba por encima de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y la provincia de Santa Fe. Y había medidas que se iban a implementar recién cuando se superara el 80 por ciento de ocupación de las camas COVID. Había una demanda de profesionales de la salud que advertían sobre la necesidad de tomar medidas inmediatas. ¿No se demoró demasiado? ¿Se pudo haber evitado ese número tan alto de casos, tomando las medidas antes?
FT: No, bajo ningún concepto. Teníamos más casos, pero la positividad de Córdoba no supera el 15 por ciento. La positividad de Santa Fe supera el 60 por ciento y la de Buenos Aires supera el 40 por ciento. Cuanto más testeos hacés, encontrás más contagiados. Pero vas a poder aislar los contactos estrechos y hacer el seguimiento de la salud de las personas. Se puede ver si hiciste bien las cosas en las tasas de letalidad. Hemos testeado en cantidad de habitantes más que cualquier jurisdicción de Argentina. Eso significa que gracias a los testeos masivos que llevaron adelante nuestros intendentes, hemos podido detectar rápidamente los casos y llegar a la situación en la que estamos actualmente.
Torres destacó que la Provincia triplicó las camas críticas de terapia intensiva, que se apoyó al sistema sanitario privado y que se nutrió a los nosocomios municipales. “Todas estas medidas juntas, en forma homogénea, consisten en una acción provincial que tiene como resultado que después de un mes de restricciones, bajamos de un 80 por ciento de ocupación de camas a menos del 50. Esto nos permite volver a flexibilizar. No sabemos qué va a pasar con la pandemia, con la variante Delta y las que van surgiendo, pero podemos decir que ya hemos vacunado a un millón y medio de cordobeses y tenemos las camas críticas descongestionadas. Los casos por día han bajado a menos de la mitad. Vamos a seguir en este proceso, monitoreando y trabajando en territorio”, adelantó.
Mirada pragmática de la política
Las elecciones de este año que renovarán bancas cordobesas en la Cámara de Senadores y de Diputados de la Nación son, para Hacemos por Córdoba, la antesala de una carrera contrarreloj para posicionar nombres propios que puedan encabezar la lista con la que en 2023 intentará retener el Ejecutivo provincial cuando por primera vez en más de dos décadas, no serán el fallecido José Manuel De La Sota y el actual gobernador Juan Schiaretti, la opción principal.
FT: Esta elección intermedia siempre fue antipática para el gobierno provincial cordobés. Hemos tenido elecciones que nunca hemos ganado y en las que tenemos que buscar la mejor performance, porque la gente vota funcionarios nacionales. Esta grieta donde se vota ‘Cristina sí, Cristina no’, arrastra a cualquier otra extracción política porque la deja sin discurso para meterse en la discusión. Afrontamos esta elección que lógicamente es antipática, que no nos da ninguna ganancia y sí mucha pérdida. Es por ello que estamos trabajando fuertemente para no sólo buscar los candidatos, sino tener una buena performance. En algún momento se especuló con la posibilidad de que el Frente de Todos acompañe a Hacemos por Córdoba en esta elección provincial, teniendo en cuenta las posibilidades y la buena relación institucional que tenemos con el gobierno nacional; pero una decisión que también considero lógica del gobierno nacional es que va a tener representatividad y va a liderar las boletas de todas las jurisdicciones del país. Ante esto y la necesidad de tener a Hacemos por Córdoba como protagonista, es que ya estamos comenzando a trabajar en comandos electorales en los 427 distritos de la provincia.
RT: Para 2023 sos uno de los nombres que suenan como probable reemplazo de (Juan) Schiaretti. No pueden empezar a imponer un nombre desde 2022. Porque del otro lado hay figuras que se vienen sosteniendo…
FT: Del otro lado, tenés muchos nombres que se anotan en la pelea para ser gobernadores. Muchos que quizás no tienen reflejo electoral ni liderazgo en ningún territorio de la provincia ni posibilidades reales de llegar a serlo. En Hacemos por Córdoba, tenés dirigentes muy importantes que vienen trabajando en lugares centrales de mucha cercanía con la gente. Dirigentes que son intendentes o funcionarios del gobierno provincial. Pero no vas a escuchar a ninguno en el día de la fecha, decir que quiere ser gobernador. Porque nosotros, en este proyecto político, tomamos las decisiones paso a paso, pero además estamos consustanciados con gestionar esta pandemia, que es lo que le preocupa a la gente. Cuando el clima electoral esté más cerquita, tampoco vas a escuchar a dirigentes nuestros proponiéndose por los medios para ser gobernador. Éste es un trabajo que se lleva puertas adentro, con números, viendo las realidades territoriales y las posibilidades reales de ganar una elección de cada dirigente. Lógicamente liderados por nuestro gobernador, que es el gran elector, el tipo que está hace 22 años en la provincia y que hoy el 65 por ciento de los cordobeses elige como el dirigente de mejor imagen de la provincia. Será él con el equipo político que lo acompaña y con autoridades partidarias, quien delinee y decida quién será la persona que tenga que encabezar la lista para ser gobernador.
RT: ¿Qué sentís que puede acercar al proyecto de Hacemos por Córdoba con el del Frente de Todos y qué sentís que lo diferencia o lo distancia?
FT: El de Hacemos por Córdoba es un proyecto de pragmatismo provincial, en donde siempre en una disputa con el campo, nos ponemos a favor del campo. En el que un proyecto como el de Vicentín nunca hubiese avanzado en nuestra provincia porque se defiende la propiedad privada a rajatabla. Que respeta el sistema republicano de derecho; cuando los jueces hablan, los políticos nos callamos. Es un proyecto con la lógica del cordobés, que es distinto al porteño, al habitante del conurbano bonaerense. No sólo en el fondo sino también en la forma. Aquí somos más revulsivos, más preguntones. Acá queremos saber por qué se toman determinadas cuestiones como decisión. Queremos saber cómo avanzamos. He tenido la posibilidad de hacerme muy amigo de dirigentes de muchos partidos, pero en particular del Frente de Todos que son de Buenos Aires; y veo que hay mucha distancia y diferencia de lo que se piensa y lo que se pregona con respecto al peronismo provincial. Más allá de ello, hay dirigentes de Córdoba que forman parte del peronismo nacional, que entienden estas diferencias. Que imagino que estarán presentes en todas las jurisdicciones provinciales. Todas las provincias tienen un sentir distinto. Está en la amplitud del que toma las decisiones y las centraliza, aceptarlas o no. Está en entender la idiosincrasia, la ideología y la forma de ser y de pensar de los habitantes de determinadas regiones para poder nuclearlos y aunarnos en una idea común y en un proyecto político consensuado. Ése es el gran desafío de un peronismo nacional. Todos tenemos como experiencia que en años anteriores no se respetó el sentir del cordobés, sobre todo en tiempos del gallego De La Sota, donde la relación era muy mala con el gobierno nacional. Actualmente se está trabajando de otra manera con el gobierno nacional. Más allá de que no vamos a confluir en estas elecciones y vamos a ir contra los candidatos del Frente de Todos, estamos trabajando en forma institucional y los dirigentes nacionales entienden la lógica del pensar cordobés.
FT: ¿Aspirás a que se puede confluir en un proyecto común hacia 2023?
RT: El proyecto de Hacemos por Córdoba tiene matices muy provinciales. Ya tiene 22 años y ojalá en 2023 podamos abrir los brazos y recibir a dirigentes y extracciones partidarias, ya sea el peronismo nacional u otros que lógicamente acompañen el sentir nuestro. Somos un proyecto amplio. Tenemos adentro al socialismo, a distintas extracciones vecinalistas, al GEN de Margarita Stolbizer…
RT: Estás diciendo recibir… ¿estarían dispuestos a incorporarse a un proyecto nacional con algún tipo de conversación más desarrollada hacia 2023?
FT: Incorporar a Hacemos por Córdoba a un proyecto nacional sería un gran riesgo en términos políticos. Sería muy difícil conseguir buenos resultados en virtud del matiz social que tiene cada uno de los partidos y de las opiniones públicas que pondera el cordobés; 70 por ciento de imagen negativa tiene el peronismo nacional y pasa lo opuesto con el proyecto de Hacemos por Córdoba, que tiene un 70 por ciento de imagen positiva. Sería una dilapidación de las posibilidades electorales. Ningún político con ansias de tener un triunfo y un buen resultado, se equivocaría de esa manera. Creo que sería más lógico, más acertado y con mejores posibilidades, hacer el modelo que tuvimos en Río Cuarto, donde Juan Manuel Llamosas fue con Hacemos por Córdoba y cerró filas con dirigentes nacionales que hoy ocupan cargos. O el modelo que hice yo en Alta Gracia en 2015 y Marcos (Torres) en 2019, donde cerramos las huestes del peronismo nacional en la ciudad. Quizás no todas, pero sí muchas. Y tuvimos y tenemos dirigentes nacionales. Es muestra de madurez política una conjunción que tiene posibilidades de éxito electoral.