La concejal de Alta Gracia Cambia y referente del radicalismo local, Lucía Allende, enfatizó la necesidad de alcanzar un consenso entre correligionarios y respaldo la candidatura de Flavio Molgara para liderar el comité radical en Alta Gracia. Además, criticó la influencia del peronismo dentro del centenario partido y destacó la importancia de preservar la identidad partidaria.
La concejal Lucía Allende, del bloque de Alta Gracia Cambia, destacó en una entrevista para Radio Tortuga 92.9 la vitalidad democrática dentro del radicalismo. «Nuestro partido debe ser de los pocos que tienen esta vida democrática interna movilizadora; los recambios son muy importantes y la estructura es clave», afirmó. Según Allende, la competencia interna es un reflejo de la voluntad de distintos sectores de manifestar su forma de hacer política, lo que considera saludable para la organización.
En Alta Gracia, dos listas se han presentado para liderar el comité del partido radical, una encabezada por Flavio Molgara, a quien Allende apoya, y otra liderada por César Navarro, a quien respeta por su larga trayectoria. «Todavía creo en la posibilidad del diálogo y de lograr un consenso donde se fusionen las dos listas», expresó la concejal, aunque reconoció que la fecha límite para alcanzar un acuerdo es el 8 de septiembre.
Para la concejal, un escenario de interna representaría un «costo alto» para el radicalismo: «Nos pasa que hablamos con los afiliados y nos preguntan si no podemos acordar».
Apoyo a Flavio Molgara
En Alta Gracia, el radicalismo enfrenta una situación interna de fuerzas en conflicto. Ambas listas coinciden en que lo mejor sería garantizar la unidad, pero ninguno de los candidatos está dispuesto a ceder en la lucha por liderar el comité. Días atrás, César Navarro expresó en Radio Tortuga 92.9 que no concibe un escenario de unidad en el que él no encabece el proyecto.
Consultada sobre la posibilidad de que Molgara se retire en favor de Navarro, Allende lo descartó de plano. «No lo creo porque ya estamos en una instancia bastante avanzada. Flavio (Molgara) hace tiempo que viene diciendo que quiere conducir los destinos de nuestro partido», subrayó. Para Allende, sería una falta de respeto hacia Molgara y su lista que han trabajado arduamente en este proyecto.
Otro aspecto relevante de la situación del radicalismo local es que ninguno de sus dos candidatos goza de gran visibilidad pública en el ámbito político. Al respecto, Allende reflexionó sobre la militancia dentro de su partido, destacando que la política no se limita a ocupar cargos públicos, sino que también se construye en la cercanía con los vecinos y la participación en diversas instituciones. «La política se hace en un montón de espacios y ambos (Molgara y Navarro) tienen esa experiencia. En lo personal, pongo una fichita más por Flavio porque creo que tiene un escalón más en el armado», sostuvo.
La mirada hacia el 2027
De cara a las elecciones de 2027, Allende subrayó la necesidad de construir una oferta electoral distinta a la del oficialismo actual en Alta Gracia. «Estamos trabajando de manera silenciosa, pero ya con vistas a un proyecto de ciudad que sea distinto y pueda sacarnos del lugar donde estamos», adelantó.
Críticas al gobierno provincial y defensa de la identidad radical
A nivel provincial, Allende expresó su apoyo a la lista liderada por Marcos Ferrer y denunció la intromisión del peronismo en el radicalismo. «Estamos convencidos de que, a través de una de las listas, hay una intromisión absoluta del peronismo en querer anular los partidos políticos», afirmó. Según Allende, el gobierno de Martín Llaryora enfrenta una situación de debilidad frente a las crecientes críticas y protestas de sindicatos y sectores productivos, lo que refleja su mala gestión, y busca fortalecerse cooptando a otros partidos.
Finalmente, Allende se distanció de la vicegobernadora Myriam Prunotto, a quien calificó como una figura ajena a los valores del radicalismo. «Ahí se acabó nuestra conexión con la Unión Cívica Radical, porque siempre hemos sido adversarios políticos», sentenció, dejando claro que el radicalismo debe mantener su identidad y no ceder ante la hegemonía del peronismo en Córdoba.