Luego del acto de presentación de la plataforma de gobierno de Hacemos Unidos por Córdoba en el Club Colón del martes por la noche, Radio Tortuga 92.9 recibió la visita de Facundo Torres, ex intendente de Alta Gracia y actual ministro de Empleo y Formación Profesional, que en las elecciones provinciales irá como candidato a legislador por el departamento Santa María.
Introductoriamente, Torres realizó un pequeño resumen de como sintió el acto de lanzamiento, del que participó la fórmula de Martín Llaryora y Myrian Prunotto, candidatos a gobernador y vicegobernadora respectivamente, además de grandes referentes del partido a nivel provincial y departamental: «desbordó el Colón con más de 3.000 personas. Fue una noche lindísima donde pudimos hablar con la militancia y comprometernos en avanzar en esta campaña defendiendo el proyecto de Hacemos Unidos Por Córdoba».
RADIO TORTUGA (RT): ¿La reunión de la militancia termina siendo una fuerza vital para el peronismo?
FACUNDO TORRES (FT): La verdad que sí. Cada uno tiene el termómetro en cada localidad y entendía que con nuestro proyecto en Alta Gracia y el departamento venimos acostumbrados con resultados positivos hace muchos años. La última elección nacional con boleta corta sacamos 25 puntos en Santa María, arriba de los 19 en provincia. En las provinciales también estuvimos por arriba de la media y ganamos las últimas 3 elecciones municipales. Venimos bien acostumbrados y entendía que necesitábamos que para que no sea una continuidad sin mística se afrontara con la seriedad y el desafío que implica afrontar un proyecto luego de un gobernador como Juan Schiaretti. Hacía falta un sacudón, y quería algo como lo que ocurrió ayer. Por eso preparamos un acto con calor, mi discurso trató de ser pasional, hablándole a la fibra íntima de cada uno, y creo que lo hemos conseguido. Los candidatos se fueron muy contentos porque el acto fue realmente muy emotivo y colmado de gente, en un clima donde la gente estaba contenta. Estoy muy satisfecho con lo ocurrido anoche.
RT: ¿Con esa impronta creés que va a seguir la campaña?
FT: La nuestra por lo menos va a ser así, sin agresiones. No vamos a halar mal de la oposición, tenemos nuestros puntos de vista y no vamos a contestar ningún agravio. Les contestaremos con sonrisas orgullosas y tranquilas de que cuando nos tocó gobernar hicimos todo lo que teníamos que hacer. Es la manera de seguir adelante y no vamos a caer en discusiones estériles para empantanarnos con lo que se juega en Córdoba. A medida que se acerca la campaña se van caldeando los ánimos y mas teniendo en cuenta que Luis Juez es nuestro principal opositor y es verborrágico, constantemente apuntando con el dedo y denunciando cuestiones respecto a nuestra fuerza política. En Santa María va por otro camino. Nos vamos a apoyar en todo lo que hicimos demostrando que hemos trabajado y vamos a seguir trabajando igual.
RT: ¿Cómo se está trabajando con los intendentes y jefes comunales que no pueden ser reelectos? ¿Puede condicionar tu candidatura?
FT: Nunca subestimo el voto de la gente, es inteligente y sabe lo que es mejor para su pueblo. Venimos trabajando muy bien con ellos y se los nombró en el acto. Son artífices en el departamento de un modelo de progreso y van a continuar aportando en sus localidades para ganar el circuito. En algunos lugares será más difícil, en otros no tanto pero hay un desgaste lógico. Hemos armado 24 candidaturas en los 24 circuitos del departamento. En algunos como Villa del Prado hemos ingresado en la coalición con el actual intendente, igual que en San Clemente, y en otros tenemos más de un dirigente que comulga con este proyecto político, donde los dirigentes están jugando internamente la sucesión de ellos en la localidad, pero abiertamente trabajarán para la lista a nivel provincial. Por eso tengo muchas expectativas con el resultado que vayamos a obtener en el departamento Santa María. Yo veo que en todos los circuitos hemos tenido un trabajo prolijo articulado y transparente, como en Dique Chico donde se determinó que los candidatos se disputen internamente la jefatura comunal, pero ambos sumando a nivel provincial para Hacemos Unidos por Córdoba. Tomamos las elecciones con alegría y pasión pero también con responsabilidad, sin borrar con el codo lo que escribimos con la mano. Desde lo ideológico, hemos entendido que esta coalición que se determinó en la provincia de Córdoba y llevó adelante nuestro partido incluyendo dirigentes del Pro y el radicalismo era hoy quizá el camino necesario para seguir fortaleciendo una Córdoba que está mejor que el resto del país.
RT: ¿Hay diálogo con Walter Saieg?
FT: No hablo con Walter desde la elección provincial de 2019. Después vinieron varias elecciones y estuve enfrentado. Cuando fui candidato a diputado el tenía un búnker a 2 cuadras y trabajaba para Alberto Fernández. En la elección de «Ellas» con Ale Vigo y Nati De La Sota en septiembre del 2021 el también trabajaba para Caserio y Gil. No he trabajado políticamente mas con él, de hecho en la elección de Marcos Torres (municipales de 2019) no solo no trabajó con nosotros sino que aportó un caudal de militantes a la oposición. Me parece absolutamente legítimo, le saco el morbo, no me rasgo las vestiduras ni me tiro los pelos, la democracia es eso. Pero en esta oportunidad él manifestó que va a trabajar abiertamente para Martín (Llaryora) y está bien. No sé si está trabajando, una cosa es una manifestación y otra ponerse a militar, pero más allá de eso festejo que la propuesta de Martín Llaryora sea apoyada por muchos dirigentes de dentro del espacio y también de fuera del espacio, como Walter.
RT: ¿El electorado de Walter Saieg para tu elección a legislador es compartido u opositor?
FT: No tengo conocimiento de ello. Tampoco sé si fue solo una manifestación pública o en un contexto de campaña. Estamos abiertos a trabajar con todos y agradecer a todos aquellos que quieran sumarse a apoyar un proyecto político que viene transformando el departamento y la ciudad. Nosotros hacemos constantemente y se puede percibir en la seriedad con la que encaramos los proyectos electorales. En Santa María gobernamos todas las ciudades grandes y quizá deberíamos estar más relajados y es al revés, le ponemos el doble y el triple y yo estoy dando vueltas como un trompo por el departamento desde el 2019, acompañando a todos los jefes comunales e intendentes. Le ponemos la cara a cada problema que va surgiendo, entendiendo q es la mejor manera de cosechar el acompañamiento de cada vecino. Pero festejo que haya dirigentes de otros partidos políticos que se sumen y nos acompañen, manifiesten el apoyo hacia la propuesta de Hacemos Unidos por Córdoba como una propuesta seria, la única creo yo que a nivel provincial la gente sabe como va a gobernar. Lo tiene perfectamente claro a como gobierna cada gobernador, intendente o jefe comunal. Este domingo tenemos elecciones en Potrero de Garay y Lozada y la gente no solo sabe cómo gobiernan bajo preceptos y principios, que no se salen del proyecto político, sino que saben cómo lo vamos a hacer, transparentando cuáles son las propuestas para realizar. Yo veo que todos los partidos de la oposición no han planteado propuestas concretas, y eso creo que es la ventaja comparativa que nuestro partido tiene con todos los otros partidos de la oposición. Que para la gente en un momento de crisis que está viviendo la Argentina tener un proyecto político a nivel provincial y local, donde se sabe quienes están al frente y que van a hacer, es lo que busca de los líderes políticos en la actualidad.
RT: ¿Cómo ves el escenario en el departamento con Leandro Morer como tu rival?
FT: Con Leo tengo mucho respeto, es el dirigente más importante que surgió del radicalismo en los últimos años después de (Mario) Bonfigli. Me enfrenté con él en 2011 y 2015 y tuve la suerte de festejar. Nos conocemos disputando elecciones y acá vamos a disputar desde otro lugar. Está inmerso en la vida pública y es sumamente legítimo que quiera ocupar este espacio dentro del departamento. Veremos qué determina la gente. Leo es mucho más localista que yo, que tengo un buen armado en Alta Gracia pero tengo armado en todos lados y Leo no venía trabajando el departamento. Me parece que ahí corremos con una ventaja. Sé que he transitado y recorrido el departamento en estos últimos años más que ningún otro dirigente de la oposición o mi mismo partido y fruto de eso es la relación que he construido con otros políticos, incluso de otros partidos. En Los Aromos tenemos como candidato propio a Daniel Pastorino, pero Nelly Morales, que es del PRO, no se cansa de decir abiertamente que nos va a votar. Y Ramón Cuello, que era jefe comunal del PRO terminó trabajando para nosotros por haber construido una relación durante muchos años, y Nelson Luján, habiendo sido presidente departamental del radicalismo pudo venir a trabajar con Hacemos Unidos por Córdoba porque durante estos tres años y medio hemos estado hombro con hombro sin importar el partido político del que era. En época de pandemia hablábamos muchas veces por día y ahí se generó un lazo que excede el partido y por eso cuando se amplía esta coalición tomó la decisión de trabajar con nosotros. Estoy muy tranquilo del trabajo territorial a nivel del departamento Santa María y de la gestión de Marcos Torres en Alta Gracias. Respeto a todos los candidatos que se van a presentar, incluso Mané Chiotti, candidata del Frente de Todos, que me consta que desde la oficina de Anses ha ido a todas las localidades del departamento. Será una contienda electoral con la alegría de estar en democracia y el 25 de junio a la noche el que gane tendrá la obligación de escuchar a los otros candidatos para ver cuales son las ideas para construir algo positivo para lo que viene.
RT: ¿A nivel provincial la perspectiva también es optimista?
FT: Estoy absolutamente convencido de que Martín Llaryora será el próximo gobernador. Gobernó la segunda ciudad del país y los dos candidatos principales la han gobernado. Cuando Juez la gobernó fue un desmanejo. Como vecinos de Alta Gracia hace mucho vemos que Córdoba no está como está ahora. Cuando era intendente y era presidente del bloque de Hacemos por Córdoba le decía al intendente (Ramón) Mestre que cuando uno entraba a Córdoba encontraba un desmanejo total: baches, espacios verdes mal cuidados. Eso es gobierno, tener cuidada tu ciudad, y hace muchos años que Córdoba no estaba así. Tengo el orgullo de decir que llamé a Martín a los 30 días de que estuviera gobernando Córdoba y felicitarlo por el estado del ingreso a la ciudad. Solo eso ya era un salto diferencial con todo lo que había antes. Martín también transformó San Francisco en un pueblo de desarrollo industrial y fue un gran vicegobernador. Tenemos el mejor de los candidatos, un proyecto consolidado y grandes gestiones en las ciudades más grandes de la provincia. Por eso estoy convencido de que el 25 de junio Martín Llaryora será el próximo gobernador de Córdoba.
RT: ¿Cómo es enfrentarte a Mané Chiotti, teniendo en cuenta que es una de las autoridades del PJ en Alta Gracia?
FT: El PJ actualmente tiene 40 consejeros y nueve autoridades. Mané es una de las consejeras. Cuando armamos el PJ de Alta Gracia nos pareció oportuno abrirlo a ideas y vertientes distintas. El kirchnerismo es parte del PJ, nosotros nunca pudimos trabajar de forma conjunta, pero siempre tuvieron candidatos. Cuando se conformó el partido, quedó Mané como integrante y creo que debe ser una elección con respeto. Ella defiende ideologías que quizá nosotros hoy no defendemos y se va a enfrentar a la estructura de Hacemos Unidos por Córdoba yendo con el Frente de Todos. Su candidato a vicegobernador es amigo mío y ha sido parte de nuestro proyecto político como Federico Alessandri, con quien estamos enfrentados desde lo ideológico pero seguimos hablando como si nada. Trato de sacarle el morbo a las elecciones, sé que a la gente y a los medios les gusta transmitirlo. Es una contienda donde los dirigentes que quieren cambiar las realidades se enfrentan, algunos lo hacen mostrando lo que han hecho como nosotros y otros lo hacen quizá denostando, otros lo hacen defendiendo proyectos de otros lugares y otros lo hacen planteando sueños. Es muy fácil plantear desde afuera, o cuanto más lejos se está del poder.
