La sesión ordinaria de este miércoles del Concejo Deliberante tuvo un capitulo especial en relación a la denuncia del radicalismo por supuestas calumnias e injurias provenidos desde un ‘perfil trucho’ de la red social Facebook y su posible vinculación con el Ejecutivo municipal. El edil radical Roberto Brunengo expuso sobre la mesa del recinto parlamentario local la resolución emitida por la Fiscalía del Segundo Turno, a cargo del Fiscal Alejandro Peralta Otonello, en relación a la denuncia que a principios de año encabezó su correligionario Leandro Morer.
A razón de que la justicia comprobó que el usuario falso correspondía a Raúl Tamborenea, quien mantenía un contrato de locación de servicios con el municipio local, Brunengo solicitó la renuncia de la Secretaria de Gestión Administrativa Cristina Roca y el Secretario de Servicios Públicos Ivan Poletta, quienes «firmaron durante dos años que certifican los servicios de estas personas que en el ámbito municipal». Al cruce salió el Asesor Letrado de la Municipalidad, Daniel Villar, quien estimó que la resolución fue malinterpretada por el edil opositor ya que si bien el empleado prestaba servicios a la entidad estatal, «la Justicia estimó que no hubo conducta ilícita por parte del Municipio».
«Nosotros hemos tratado de identificar los lugares donde trabaja tanto él como su familiar y no lo logramos ubicar, como tampoco logramos que ningún empleado municipal los reconozca como compañeros de trabajo lo cual es muy llamativo porque hace más de dos años que trabajan en el municipio pero nadie los conoce», sostuvo el concejal radical en relación a la situación laboral que vinculaba a Tamborenea con el Ejecutivo municipal. Ante ello, Villar precisó que «actualizaba la pagina institucional del municipio y algunos perfiles oficiales de los funcionarios de las áreas más expuestas como Desarrollo Social y Servicios Públicos». «Hablo en pasado porque el intendente no le renovó el contrato ya que se encuentra sospechado de calumnias e injurias», agregó el funcionario.
Según Villar, «la denuncia se archiva parcialmente porque el tribunal confirmó que no hubo conducta ilícita por parte ni del municipio ni de los funcionarios del municipio, esto fue malinterpretado en la sesión y se lo presentó como un acting político». Al mismo tiempo cargó contra los ediles de la oposición: «Esta persona que respondía al perfil Mario Esperanza, trabajaba no solamente en los perfiles de la Municipalidad y los funcionarios, sino también trabajó en el perfil del concejal Brunengo, trabajó sobre el perfil de Morer, y hay incluso una carta por el tema del Super Mami firmada por Morer, que fue redactada puntualmente por esta persona, entonces ahora resulta que quien era amigo como no nos gusta lo que publicó, lo denunciamos».
En este marco, Brunengo ahondó en la interna peronista aduciendo que «cada vez que uno intenta poner una visión distinta sobre algún tema que le importa al sector que lidera el intendente Torres dentro del peronismo, aparecen estos perfiles agrediendo y mintiendo descaradamente, porque incluso el sector que responde a (Walter) Saieg también fueron victimas de estos ataques». Incluso la concejala oficialista Daniela Ferrari, en medio de la sesión de este miércoles, exigió la renuncia del empleado en cuestión: «Si realmente (las publicaciones) salieron de las computadoras de la municipalidad y son esas personas, yo también le exijo al señor Intendente la renuncia de esas personas, porque ya también fui agraviada».
