El próximo sábado 25 de enero, de 9 a 11 de la mañana, la plaza de La Paisanita será el escenario de una asamblea vecinal donde se elegirán los integrantes de la Comisión Vecinal de Gestión de la reserva natural que comenzó a consolidarse en esta localidad cordobesa.
Francisco Bertea, uno de los impulsores de esta iniciativa, conversó con Radio Tortuga 92.9 sobre el proceso y la importancia de este proyecto. “ Esta es la primera acción que vamos a emprender con los vecinos y vecinas que venimos trabajando en la creación de esta reserva natural tiene como objetivo consolidar este espacio. Esto comenzó entre 2019 y 2020, cuando los vecinos se organizaron frente a la crisis hídrica y el avance del desarrollo inmobiliario. Aunque la propuesta quedó trunca en ese momento, el año pasado decidimos retomarla, motivados por los mismos problemas, y encontramos una gestión comunal más receptiva e interesada en estas problemáticas. Así que hemos trabajado en conjunto para avanzar con la propuesta”, explicó Bertea.
El vínculo entre el entorno natural y la comunidad es una de las motivaciones principales de quienes impulsan la iniciativa. “Hace más de diez años que vivo en el valle de Paravachasca, y estas problemáticas están presentes en toda la región. Tiene que ver con la observación de cómo se va destruyendo el bosque nativo. Uno de los encantos de La Paisanita y de La Isla es justamente la presencia del monte, y la necesidad de cuidarlo”, reflexionó.
El rol del consejo vecinal de gestión
La comisión vecinal, a conformarse durante la asamblea, será un órgano participativo fundamental en la preservación y desarrollo de la reserva. Según Bertea, este espacio “fomenta la participación de los vecinos y busca que presenten proyectos que aporten al desarrollo y cuidado de la reserva. Además, se encargará de velar por un plan de gestión elaborado por profesionales, ya que toda reserva necesita documentos técnicos que respalden su administración”.
La comisión estará integrada por tres vecinos o vecinas que desempeñarán su función ad honorem durante un período de dos años. La intención de este cogobierno, que combina la gestión comunal con el consejo vecinal, es fortalecer los consensos y construir políticas ambientales acordes a las necesidades del territorio.
Desde el 4 de diciembre pasado, todo el ejido de La Paisanita fue declarado formalmente como una reserva natural. Este título, aunque no implica restricciones inmediatas, reconoce las políticas nacionales y provinciales en materia de derechos ambientales y establece un marco para continuar construyendo acuerdos vecinales que permitan proteger y potenciar el patrimonio natural de la localidad.